- El mandatario dijo que no será fácil la defensa de Emilio Lozoya, incluso si la lleva a cabo el exjuez español, Baltazar Garzón
ARTURO RODRÍGUEZ GARCÍA
CIUDAD DE MÉXICO (apro)
El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró hoy que defender al exdirector de Pemex Emilio Lozoya Austin no será fácil, incluso para el exjuez español Baltazar Garzón, y echando mano de su refranero destacó así la dificultad: “No son tamalitos de chipilín”.
Ante la posibilidad de que Garzón asuma la defensa de Lozoya, detenido en semanas recientes en España a pedido de México a la Interpol, López Obrador respondió a pregunta expresa que se trata de “una figura”, “famoso por diferentes casos” pero ahora presta un servicio que cae en el ámbito de lo particular.
El mandatario mexicano recordó que el abogado español enjuició en su tiempo en la Audiencia Nacional, al exdictador chileno, Augusto Pinochet, y mencionó que estaba enterado, aunque no lo sabía de cierto, que actualmente asesora al expresidente boliviano, Evo Morales.
En su conferencia de prensa matutina, el presidente consideró que el caso Lozoya no representa un reto para el Estado Mexicano y la defensa que haría de él el juez Garzón.
“Depende de la causa. Siempre los abogados suelen ser buenos cuando se trata de defender una causa justa, hablábamos de juzgar a Pinochet… pero si se trata de defender a un presunto defraudador, por muy bueno que se el abogado…”, expuso.
López Obrador no quiso adelantar el futuro del juicio, pero sí expresó: Garzón “la tiene difícil, no son tamalitos de chipilín”.
Emilio Lozoya fue detenido en Málaga, España, el 12 de febrero por operaciones de procedencia ilícita y delitos relacionados con corrupción, que se habrían cometido entre 2012 y 2015, cuando se desempeñó como titular de Pemex. Tras conseguir que la Interpol emitiera una ficha roja sobre el exfuncionario, México debe seguir el proceso de extradición que podría litigar el afamado abogado español.