- El COVID-19 ya “es un asunto de seguridad nacional”, dijo el mandatario
- Hay coronavirus también en Tixtla, en la Montaña baja
- “Nuestro deber convocar a la población para que asuma la parte de responsabilidad que le corresponde. Actuamos todos juntos o no tendremos capacidad de respuesta frente al problema que hoy agobia al mundo”, dijo
FERNANDO POLANCO OCHOA/IRZA
CHILPANCINGO, GRO.
El gobernador Héctor Astudillo Flores anunció anoche, mediante un comunicado, el cierre de las playas de Guerrero.
Esto significa que todas las playas de la entidad, se cerrarán al público ante la cercanía del periodo vacacional de Semana Santa, puesto que la contingencia sanitaria por coronavirus COVID-19 se ha convertido ya “en un asunto de seguridad nacional”.
“Considerando que la epidemia se ha extendido por todo el país y ha sido calificada como “grave de atención prioritaria” por la Secretaría de Salud Federal y el Consejo de Salubridad General, el Gobierno del Estado ha determinado suspender las actividades recreativas en las playas de la entidad.
“El Gobierno del Estado toma esta delicada decisión en un escenario insatisfactorio: hemos tenido que optar entre la protección a la vida o la suspensión de las actividades económicas. Es claro que, con todos los problemas que conlleva, la economía siempre será recuperable en tanto exista el factor humano.
“La suspensión general de actividades tiene el propósito de que todos asumamos: Quédate en casa. Esta es la razón primordial por la cual se han cancelado vuelos y cruceros; cerrado hoteles y centros de convivencia, lo que incluye no concurrir a espacios públicos, como son las playas de los distintos destinos turísticos de nuestra entidad”, escribió el mandatario, en un comunicado que firma conjuntamente con el titular de salud, Carlos de la Peña Pintos.
Agregó: “Las medidas que hoy anunciamos también las han asumido gobiernos como el de Baja California Sur, Jalisco y Sinaloa; en el caso de la Ciudad de México se han cerrado centros comerciales. Por ello, es nuestro deber convocar a la población para que asuma la parte de responsabilidad que le corresponde. Actuamos todos juntos o no tendremos capacidad de respuesta frente al problema que hoy agobia al mundo”.
Dijo que como representante del Poder Ejecutivo, se ha reunido con los sectores sociales, económicos y políticos para convenir la importancia de la suspensión de actividades y la concurrencia a zonas de esparcimiento público. “De manera especial, con los presidentes municipales y los diputados al Congreso del Estado, para que
en concurrencia de sus facultades y deberes actuemos de manera conjunta”.
Y finaliza: “La presente disposición entrará en vigor este jueves 2 de abril, a las 20:00 horas, y hasta el 30 de abril del presente año. En caso de que la pandemia exigiera la ampliación de este periodo, se hará del conocimiento público.
Quédate en casa. La seguridad empieza con cada uno de nosotros. La salud de la familia guerrerense es el deber de todos”.
Entrevista
Horas antes, en entrevista (por videollamada) con Joaquín López Dóriga, en Grupo Fórmula, el gobernador anunció que estaban discutiendo el cierre de playas. Incluso confirmó que “muchos hoteles están anunciando ya su cierre”, no sólo en Acapulco, sino en Ixtapa, Zihuatanejo, lo que ha generado “preocupación en una gran cantidad de personas (comerciantes) que viven de lo que se vende en las playas”. Astudillo informó que Guerrero se coloca en el lugar 21 nacional en incidencia de COVID-19 con 15 casos confirmados en Acapulco, Chilpancingo, Taxco y el último en Tixtla, con una defunción por este problema.
Suman también 80 sospechosos, 73 negativos y una defunción.
Dijo que esta pandemia ya provoca “efectos muy visibles” en el rubro turístico, el cual, junto con la minería, es una de las palancas económicas más importantes de la entidad y que podría complicarse más en este periodo de Semana Santa porque históricamente el puerto de Acapulco ha sido un punto de referencia en estas fechas, sobre todo por su cercanía con la Ciudad de México, por lo que “estamos frente a toda una cascada de decisiones que se deben tomar. Son decisiones fuertes (…) porque nunca, que yo recuerde, ha habido un caso en que se tenga que enfrentar en Semana Santa una situación de tomar decisiones de si van a estar abiertas las playas o si van a estar cerradas”, soltó.
Al respecto agregó: “Abrimos nuestras puertas, les decimos (a los turistas), ‘vénganse, aquí no hay ningún problema’, ‘fíjense que están cerrando las playas en Baja California, en Jalisco, pero vénganse a Guerrero’, pues sería una grave irresponsabilidad. Tenemos que actuar con mucha responsabilidad, con mucha determinación. Lo que menos debemos hacer es dejar de tomar decisiones, aunque sean drásticas, duras, difíciles”.
Astudillo refirió que, en Guerrero, particularmente en Acapulco, hay muchos comerciantes informales, quienes “están en un momento ya muy difícil (porque) de qué van a comer o vivir en los próximos días y tienen razón, entonces, aquí está el dilema: qué hace un gobierno estatal para enfrentar todo esto en coordinación con un municipio, pero también en espera de la federación”.
También se refirió a los migrantes radicados en Estados Unidos que piensan pasar en Guerrero la Semana Santa: “Hay que recomendarles, con todo el dolor de nuestro corazón, que no es el mejor momento para venir a su tierra, es muy lamentable, pero tenemos que decirlo. Lo otro, no decir nada, quedarnos calladitos o llevárnosla de a muertito”
En ese sentido comentó que muchos guerrerenses radican en Nueva York, ciudad estadounidense que registra la mayor crisis por esta enfermedad.
El gobernador Astudillo consideró que la pandemia del COVID-19 pondrá “a prueba a los gobernantes”, quienes demostrarán si están preparados para atender a su población. “Yo estoy pensando que los gobernantes tenemos que ver a millones, Guerrero tiene 3.5 millones de habitantes y el gobernador Héctor Astudillo está pensando, aun cuando las medidas sean dolorosas, criticadas, detestables por algunos, por varios, por muchos, pero la mayoría está esperando que haya determinaciones y resoluciones que piensen en la salud de los guerrerenses”
-¿Cómo cuáles? -le insistió Joaquín López Dóriga.
-El caso de los hoteles, de las playas… No será una medida popular anunciar en su momento, si es que así se anuncia, cerrar las playas de Guerrero. No será una medida que agrade a muchos que viven de las playas, pero creo que hay que pensar en la mayoría, pensando que este es un asunto de salud y no de una idea de alguien en lo personal”.