AGENCIAS
CIUDAD DE MÉXICO
El mensaje del presidente Andrés Manuel López Obrador ante la emergencia por el Covid-19 es decepcionante y no es lo que los empleadores necesitan, por lo que las consecuencias para las empresas pueden ser graves, advirtieron líderes del sector privado.
«Es decepcionante. Se dejan solos a los micro y pequeños empresarios y a sus trabajadores para que se rasquen con sus propias uñas. Hay una falta de claridad en los 2.5 millones de empleos que van a crear en nueve meses cuando no fueron capaces de sostener el empleo el año pasado al ritmo que estaba creciendo», afirmó en entrevista Enoch Castellanos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).
Si bien la devolución rápida de impuestos fue una compromiso de López Obrador emitido en el discurso, esto no es suficiente.
«Es nuestro dinero, es dinero al que ya tenemos derecho. Eso es positivo, pero es un paliativo, era una medida que, junto con otras, nos iba a dar oxígeno», subrayó Castellanos.
Advirtió que la consecuencia de no apoyar a las empresas puede ser la pérdida de entre 500 mil y un millón 400 mil empleos.
Por su parte, Francisco Cervantes, presidente de la a Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin), señaló en su cuenta de Twitter que el informe que rindió el Presidente no es lo que los empresarios esperaban.
«Las consecuencias pueden ser graves», subrayó.
Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), consideró desde la misma red social que en el mensaje presidencial no se anunció ninguna medida relevante para afrontar la crisis económica.
«En plena emergencia, leyó una pieza de divulgación ideológica, embistiendo fantasmas del pasado y abandonando su deber como Jefe de Estado para unir a la nación», mencionó.
En un comunicado agregado, consideró que, ante la coyuntura del Covid-19, los planes del Presidente ya perdieron sentido.
«Los planes de la presente Administración federal, históricos para unos, y absurdos para otros, ya perdieron sentido ante la presente coyuntura. En cambio, al Presidente de la República parece no importarle las micro, pequeñas y medianas empresas, que pagan los impuestos con los que opera el Gobierno», señaló De Hoyos.
Criticó que para el titular del Poder Ejecutivo Federal primero son sus obras «faraónicas» y sólo después todo lo demás.
En este sentido, recordó que el Gobierno federal dará 27.5 mil millones de pesos al Aeropuerto de Santa Lucía (mil 343 por ciento más que en este año) y 26.7 mil millones al Tren Maya (un alza de 969 por ciento).
De Hoyos señaló que los gobiernos de todo el mundo, salvo el de México, están priorizando, ante la crisis, la protección del ingreso de las familias, tratando de salvar el mayor número de empresas posibles.
Refirió que mientras que el Gobierno de Estados Unidos destina 849 mil millones de dólares -equivalente al 10 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB)- para salvar a las empresas, en México sólo se vislumbra inyectar créditos por 63 mil 700 millones de pesos que, vía banca de desarrollo, equivalen a 1.4 por ciento del gasto programable para 2021 y a 0.2 por ciento del PIB del mismo año.
A su vez, José Manuel López Campos, presidente de la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio (Concanaco), advirtió en entrevista que estuvo ausente el apoyo a los sectores productivos.
«La parte de inversión pública y continuar con los programas sociales, qué bueno que la hay, porque genera empleos. Pero hay que tener en cuenta que es un gasto para el erario público», dijo.
«Lo que no vimos es el apoyo a los sectores productivos. La devolución del IVA es una obligación del Estado. Se requiere urgentemente de apoyar a las pymes que no van a poder llegar a final de la contingencia de esta pandemia», subrayó López Campos. (Reforma)