* Una de las víctimas fue asesinada durante la celebración clandestina de una pelea de gallos, y dos más sobre el boulevard principal de Ayutla de los Libres; trascendiendo que hubo por lo menos siete personas lesionadas
FRANCISCO JAVIER HERNÁNDEZ
AYUTLA DE LOS LIBRES, GRO.
Habitantes de la cabecera municipal de Ayutla de los Libres, vivieron minutos de terror la noche del pasado viernes 15 de mayo, luego de que hombres armados irrumpieran en una pelea de gallos clandestina, donde mataron a un hombre e hirieron a varias personas más; minutos después otras dos personas fueron asesinadas sobre el boulevard 1º de Marzo.
La persona asesinada en la jugada de gallos, fue identificada como Víctor Contreras Alemán, vecino de la colonia San Felipe, quien fungió como comandante de la policía ciudadana del SSyJC de la UPOEG, e hijo del comandante Alberto Contreras Mayo, también de la UPOEG en Ayutla.
Las otras dos personas fueron asesinadas cuando viajaban a bordo de una camioneta de color negro, sobre el boulevard 1º de Marzo, de la cabecera municipal de Ayutla a la salida en dirección a Tecoanapa, siendo identificados como Manuel Sánchez Valente, propietario del bar “Las Tóxicas”, y su primo Francisco Valente, quien fungía como encargado del bar “Las Tóxicas”.
Los hechos
A pesar del hermetismo en torno a los hechos, trascendió que Julio César Carrillo, vecino de la colonia Israel Nogueda Otero, cuya imagen fue difundida a través de las redes sociales, llegó a la jugada de gallos y asesinó a Víctor Contreras Alemán, para después huir del lugar de los hechos. Esto ocurrió alrededor de las 10:00 de la noche en la colonia Barrio Nuevo.
Posteriormente, se tuvo conocimiento que sobre el boulevard principal, a la salida a Tecoanapa, dos hombres fueron asesinados a balazos, cuando viajaban a bordo de una camioneta de color negro, siendo identificados como Manuel Sánchez Valente y su primo, Francisco Valente, ambos con domicilio en la colonia San José.
Cabe mencionar que debido a que el municipio de Ayutla de los Libres es regido por usos y costumbres, son los mismos policías ciudadanos del SSyJC de la UPOEG, quienes tienen el mando de la seguridad pública del municipio, por lo que al ser asesinado un ex integrante de esta corporación, se han mantenido herméticos sobre los hechos.