CRAC detiene a Ministeriales que irrumpieron en un domicilio
YONATHAN BAUTISTA
SAN LUIS ACATLÁN, GRO.
Dos elementos de la Policía Investigadora Ministerial fueron detenidos este jueves 22 de octubre, después de irrumpir en un domicilio en la colonia San Antonio de San Luis Acatlán, sin identificarse ni presentar un oficio de cateo.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 10:30 de la mañana, en el domicilio de Celestino López Quiroz, ubicado sobre la calle Corregidora, esquina con Justo Sierra, de la colonia San Antonio, donde dos supuestos Policías Ministeriales ingresaron por la parte trasera del domicilio, para revisar la casa y tomar fotos.
El agraviado indicó que al ver a los hombres con armas largas, les pidió que se identificaran y que le explicaran qué hacían en su domicilio, pero le contestaron de forma prepotente y agresiva, que si quería saber que se fuera a Ometepec.
Los uniformados iban acompañados por sus hermanos, Rosa López Quiroz y Víctor López Quiroz, por lo que continuó pidiéndoles una explicación, pero ellos se portaron tajantes y continuaron tomando fotografías, sin mostrarle ninguna identificación, ni documento alguno para justificar su presencia en el domicilio.
Por ello, solicitó inmediatamente el apoyo de la CRAC-PC, para que le ayudaran a comprobar si esos hombres en realidad eran Policías Ministeriales.
Los uniformados se retiraron del lugar, a bordo de un vehículo oficial, un Chevrolet Bert, con número económico 09, el cual traía logos de la Fiscalía General del Estado.
Minutos más tarde, el vehículo fue identificado sobre la calle Emilio Carranza del barrio de San Miguel, en un negocio de pollos asados, propiedad de Karina Ramírez López, a quien los Policías Ministeriales se encontraban entrevistando.
Por ello, los policías comunitarios les solicitaron que se presentaran en las oficinas de la CRAC-PC, donde se identificaron como Albertano Justo Ramírez y David Hernández Vargas.
Les pidieron llamar a sus superiores para solucionar el asunto, por lo que hora y media después, acudió Bartolo Vázquez Álvarez, Fiscal Regional, y Edmundo Muñoz Apariz, comandante regional.
Una vez estando todos en audiencia, el agraviado explicó: “Se me hace un abuso que hayan entrado a mi domicilio sin ninguna explicación, sin identificarse, además de que agredieron a un cachorrito de chihuahua. Anduvieron con sus armas largas tomando fotos, comportándose de forma déspota y violenta, negándose a dar todo tipo de información que les solicitaba”.
Por otro lado, recordó que hay un acta de acuerdo, donde la señora Rosa López Quiroz se compromete a no meterse con él, pero no lo está respetando.
El comandante regional indicó que se trata de una carpeta de investigación, por una denuncia realizada por un familiar suyo, por lo que se estaba realizando la investigación.
Lo incorrecto de todo esto, reconoció, es que los elementos no pidieron permiso para entrar al domicilio.
A su vez, los coordinadores de la CRAC pidieron a las autoridades ministeriales, que cada vez que vayan a ingresar a territorio de la CRAC-PC, notifiquen a la Casa Matriz para evitar estos contratiempos y malentendidos; enseguida liberaron a los policías ministeriales, a quienes les pidieron trabajar en coordinación.
Antecedentes.
Entrevistado al término de la audiencia, Celestino López Quiroz expresó las razones que originaron todo esto.
Relató que desde el 14 de septiembre de 2014, día en que falleció su madre, ha estado en constante controversia con su hermana Rosa López Quiroz, quien ha intentado despojarla de un inmueble.
“Fui testigo de que Rosa López Quiroz robó los documentos de la casa, para después decir que mi madre se los dió a ella como herencia. Han intentado incriminarme en todas las instancias de justicia con tal de afectarme, señalándome de violencia intrafamiliar, incluso con testigos falsos como Karina Ramírez López, quien es mi sobrina y ha inventado una serie de argumentos para apoyar a mis hermanos”.
“Karina está casada con Román Olegario, ella demandó incluso a sus padres, Eugenia Quiroz y Lorenzo López, para que le heredaran la casa ubicada en calle Río Bravo, de la colonia San Antonio, entonces, si es capaz de hacer eso con sus padres, qué puedo esperar yo que soy su tío. Por esa demanda, ahora tengo que presentarme a declarar en las oficinas de delitos sexuales en Ometepec, pese a que no cometí ningún delito”.
