REDACCIÓN
SAN LUIS ACATLÁN, GRO.
Entre los allegados del ex presidente municipal, Agustín Ricardo Morales, este miércoles se propagó la especie de que había presentado una demanda penal por el delito de intento de privación de la libertad, en contra de varios funcionarios de la actual administración municipal, sobre todo policías municipales.
Los encargados de propagar los rumores, todos allegados del ex alcalde, también manifestaron que la demanda incluía a los medios de comunicación y reporteros que le dieron cobertura a su escape, por piernas, del evento de la toma de protesta del nuevo presidente, Adair Hernández Martínez.
La versión de la especie no pudo ser corroborada de manera oficial; sin embargo, el rumor desatado por los allegados del ex alcalde ratifican lo que el mismo Agustín Ricardo Morales publicó en su muro de Facebook minutos después de haber escapado por piernas del evento de la toma de protesta del nuevo presidente municipal.
A continuación se reproduce de manera textual del mensaje de Agustín Ricardo Morales desde su cuenta de Facebook “Agustin Ricardo Cnc Slagro”:
“Al pueblo de SAN LUIS ACATLÁN: Lo que acaba de pasar fue muy lamentable. Hago responsable al gobierno municipal de mi integridad física y la de mi familia una vez que fui agredido por la policía municipal (no por los pueblos) y voy a proceder legalmente.
Fui presidente municipal y me retiro con mucha dignidad porque trabajé con esmero y entrega total para servir a mi municipio. Y no voy a permitir desde estos momentos que se me difame o denigre mi imagen.
Como ciudadano exijo que la autoridad cumpla su papel de darle seguridad a los ciudadanos y no ocupar a la policía para atacar a sus adversarios políticos. Buenas tardes”.
Cabe decir, que ese día, este medio abordó a los representantes de pueblos del interior del municipio, quienes desmintieron que hayan venido con intención de detenerlo, sino para ponerse de acuerdo con Adair Hernández acerca de las obras que quedaron pendientes.
Por lo tanto, se entiende que el ex alcalde huyó de la sesión solemne por su propio temor.