YOANTHAN BAUTISTA
SAN LUIS ACATLÁN, GRO.
La joven Daniela Martínez, de 19 años de edad y quien se desempeña como empleada del Modelorama ubicado sobre el boulevard San Luis Rey de Francia, denuncia por este medio al juez calificador de San Luis Acatlán, Marcos Antonio Sierra González, por agresiones físicas, verbales y amenaza.
La quejosa recurrió a este medio para señalar que alrededor de las 8:00 de la noche de este miércoles 14 de octubre, tuvo un incidente en su lugar de trabajo, donde a pocos minutos de cerrar el negocio arribó el licenciado Marco Antonio Sierra González, juez calificador del gobierno municipal, en compañía de una mujer que presuntamente es su secretaria, de nombre Verónica Hernández Bautista, originaria de Cuanacaxtitlán.
Agregó que el individuo tomó dos cervezas del refrigerador sin siquiera pedirlas ni preguntar si podía vendérselas, pues se encontraba completamente ebrio. “En seguida atendió una llamada mientras tomaban la cerveza. Al terminársela, volvió a tomar otras dos cervezas más y en eso yo le comenté que tenía que cerrar el lugar porque había un horario que respetar de 10:00 de la mañana a 9:00 de la noche
“Sin embargo, me ignoró y volvió a tomar otras dos cervezas. En eso, la mujer que lo acompañaba dijo que le llamaría al dueño del negocio y tomó su celular para decirle que yo los estaba corriendo y que estaban esperando a una amiga que iba a ir a tomar con ellos allí; mientas hablaba, Marco Sierra le pidió el teléfono para hablar con el dueño y comienza a amenazarlo.
“Marcos Sierra le exigió a mi patrón que le diera un cartón de cervezas, además de amenazarlo diciéndole que estaba infringiendo la ley mencionando una serie de artículos. También le dijo que si no ponía orden él se encargaría de cerrarle el lugar, ya que actualmente era juez calificador de la administración del presidente Adair Hernández Martínez”.
La joven agregó que las amenazas continuaron. Señaló que tenía unos papeles de un sujeto que había estado detenido en barandilla y que días antes había estado tomando en ese establecimiento y que con eso podía hacer que lo sacaran de San Luis Acatlán y le cerraran el negocio.
Abundó que Marco Antonio Sierra, presidente además del PT en este municipio, volvió a reiterarle al dueño que no iba a pasar por alto el que yo le hubiera dicho que ya iba a cerrar el negocio, por lo que después iba a pasar a verlo.
“Después que le colgó, se dirigió a mí y me pidió medio cartón de cervezas Modelo especial. En eso yo me comunico con el dueño para decirle lo que el juez calificador me pidió. Cuando yo le pregunto si iba a ser cartón lleno o a la mitad, el hombre alcoholizado y enardecido gritó diciéndome que si yo no había escuchado, que él estaba pidiendo medio cartón. Yo le dije que sí, pero le indique que el cartón era sólo 6 piezas y cuando yo le estaba mostrando el cartón, me empujó, diciéndome que yo no sabía con quién me estaba metiendo ya que él era el juez y que yo era una escuincla, que él tenía un papel y yo no tenía nada. No conforme, la mujer que se dice su secretaria dijo que si yo no sabía quién era él. Yo le contesté que no porque fuera lo que él fuera le daba el derecho de irme a agredir e insultar.
“Después de eso le dije que allí estaba su cartón y me dijo que ya no lo quería, que mejor se lo cambiara por Victoria de media, mientras seguía insultándome.
“Tanto fue lo que me dijo que no pude contener el llanto por todas las ofensa, en ese momento me sentí sola y acorralada por ese sujeto violento.
“Nuevamente me dirijo a él para entregarle su cartón y cobrarle las cervezas que se había tomado, y me vuelve a gritar que si yo era sorda, que si no había escuchado que él no iba a pagar nada, a lo cual le respondí que no tenía indicaciones del dueño de darle la bebida.
“Por lo que llame otra vez a mi patrón para decirle que el licenciado no quería pagar las cervezas, me dijo que no se las cobrara.
“Pero al último ya no se quería salir del establecimiento y se puso a platicar con la mujer que lo acompañaba. Alrededor de las 9:50 llegó uno de mis compañeros, quien les volvió a decir que ya se iba a cerrar el lugar. En eso, antes de que se saliera Marcos Sierra volvió a pedir otras 2 cervezas, y al salir dejo el cartón en el mostrador diciendo que si no lo íbamos a llevar hasta el carro, enseguida se fueron”.
La denunciante quien asegura haberse sentido intimidada por este sujeto. Al dar su versión a este medio en compañía de sus familiares, pidieron al alcalde Adair Hernández Martínez así como al regidor de seguridad publica, Jose Luis Apreza Hernández, su intervención para la destitución de este sujeto que no abona al servicio al pueblo.
Precisaron sus familiares que con qué calidad moral se sirve al municipio con personas de este tipo y si esa es la gente que va a estar en la administración no es una buena opción ni buen ejemplo, sobre todo en el cargo que ostenta el hijo del ex regidor Filomeno Sierra Guerrero, que asegura ser juez calificador y tener el aval de hacer lo que quiera sin importar cuanto ofende o hace daño.
Agregó que de cualquier cosa que pueda sucederle, “hago responsables públicamente a Marco Antonio Sierra González y Verónica Hernández Bautista”.