*Líder del Congreso refiere que en las asambleas participan hasta integrantes de la Policía Comunitaria
*La última palabra la tienen los pueblos, no las organizaciones, insiste
*“Fuera de lugar” quien pide que lo sometan a reeducación, señala
ROGELIO AGUSTÍN/SNI
CHILPANCINGO, GRO.
El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso local, Alfredo Sánchez Esquivel, sostuvo que los pueblos donde tiene presencia la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) no se oponen a la consulta sobre Derechos, Cultura Indígena y pueblos Afromexicanos, lo que contradice con la postura que públicamente manejan los coordinadores de las casas de justicia y organizaciones aliadas.
La jornada del martes 5 de abril, representantes de las casas de justicia de San Luis Acatlán; Zitlaltepec, Espino Blanco, Caxitepec y El Paraíso marcharon en Chilpancingo para exigir que el Congreso de Guerrero suspenda la consulta que se encuentra en curso, porque desde la perspectiva de la CRAC, no cumple con los parámetros del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Sánchez Esquivel sostuvo que hasta el momento “no queda claro lo que buscan los representantes” de la CRAC y de las organizaciones aliadas, pues mientras ellos marchaban en la capital del estado, en sus zonas de influencia, particularmente en la Costa Chica se realizaban reuniones en las que participaban de 500 a 600 personas, mismas que escuchaban y deliberaban respecto a la consulta.
De hecho, dijo que si se sumaran los números de quienes participaron en las reuniones a favor de la consulta, podría observarse que se superaba en mucho a los que marcharon en la capital del estado.
“Los trabajos estaban en la Costa Chica, en la Costa Grande y en la Montaña; había miles de personas reunidas en diferentes puntos del estado, deliberando, discutiendo y analizando las propuestas de iniciativa”, anotó.
A manera de ejemplo, dijo que mientras Marco Antonio Suastegui Muñoz, vocero del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la Parota (Cecop) marchaba en Chilpancingo, el diputado por Morena, Joaquín Badillo Escamilla encabezaba una reunión con habitantes de Cacahuatepec, quienes escuchaban lo relacionado con la consulta, a escasos metros de la casa de Suástegui Muñoz.
“Hubiera sido interesante que en su comunidad se manifestara el rechazo hacia la consulta, pero lo sorprendente es que sí hubo participación”, anotó.
Otro caso que mencionó, es el hecho de que este miércoles 6 de abril se realizaron asambleas en las comunidades mixtecas de Ayutla, donde tienen presencia la CRAC y la UPOEG.
“Ahí, algunos dicen que no van a participar, pero en estos momentos sí van a participar; con eso decimos que la última palabra no la tienen algunos actores que se asumen como dirigentes sociales, la tendrán las comunidades”, aseguró.
Continuó: “La semana pasada estuvimos en la zona mixteca con uno de los que participaron en esta marcha, en su comunidad que es La Cortina, estuve con todos los integrantes de la Policía Comunitaria; hombres y mujeres porque ahí participan hombres y mujeres como policías, les expusimos las cosas de manera muy respetuosa y quedaron de darnos una respuesta”.
Agregó: “El que habló se llama Juan, le decimos Juanito, es miembro de la CRAC y yo estuve con ellos, nos llevamos muy bien, yo sé que puedo y no hacer en las comunidades, nunca les he faltado al respeto y nunca he discriminado ni faltado al respeto a nadie”.
Suástegui,
fuera de lugar
La tarde del martes 5 de abril, el vocero del Cecop, Marco Antonio Suástegui propuso que la CRAC detenga al presidente de la Jucopo y que lo someta a reeducación durante el tiempo que le queda como diputado local.
Alfredo Sánchez Esquivel comenta que ha saludado al dirigente social durante un par de ocasiones, la primera en un cierre de campaña de Morena, en el puerto de Acapulco y durante la ocasión en que estuvo en el Congreso para fijar una postura respecto al nombramiento de titular en la Fiscalía General del Estado (FGE).
Tras conocer la propuesta del martes indicó: “Yo lo veo completamente fuera de lugar, pensaba que era una persona mucho más seria, por el hecho de asumirse como dirigente social, pero yo no vendo piñas; pertenezco a una región muy particular, he pertenecido a organizaciones durante muchos años, tal vez mucho más que él”.
Dijo que la actitud en su contra resulta agresiva, pues si algún diputado local asumiera ese tipo de actitudes ya sería objeto de linchamiento mediático.
Sin embargo, refirió que encuentra una justificación: “Hay pobreza espiritual y se muestran algunas frustraciones en ese tipo de comentarios”.