Abarca está internado, «puede morir», denuncia su hija
ÁNGEL GALEANA/RÉPLICA
CHILPANCINGO, GRO.
La hija del exalcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, Yazareth Abarca, denunció que su padre está internado en el hospital General Adolfo López Mateos en Toluca, en donde fue operado hace 15 días y no lo están atendiendo adecuadamente.
Yazareth Abarca publicó en redes sociales un escrito en el que aseguró que la vida de su padre está en peligro ante una operación que pretenden hacerle en el hospital por un problema gastrointestinal, la cual, digjo, es muy invasiva.
La hija del ex alcalde José Luis Abarca, quien está preso en el Cefereso del Altiplano acusado de delincuencia organizada, dijo que su padre ingresó al hospital hace 20 días, y 5 días después fue operado, aunque no detalló de qué.
Dijo que tras la operación no mejoró su estado de salud porque probablemente no recibió un buen diagnóstico, además de que no ha sido atendido adecuadamente y tampoco tiene un plan de nutrición.
«Su médico tratante, el hospital y el Cefereso 1 Altiplano no nos dan la facilidad de llevarlo a un hospital donde reciba atención multidisciplinaria, específicamente donde tenga un servicio de oncología ya que mi papá tiene cáncer y adicionalmente a ese cuadro se tiene una complicación gastrointestinal que se quiere resolver de una manera muy invasiva, la cual puede afectar su estado de salud futura», denunció.
José Luis Abarca padece de cáncer de próstata y no es la primera vez que está en atención médica. El pasado mes de enero fue trasladado en estado delicado de salud al hospital privado Médica Sur para ser valorado.
Su hija señaló que los médicos en el hospital Adolfo López Mateos pretenden operarlo del problema gastrointestinal cuando es una intervención que se puede evitar con otros tratamientos, «mi papá puede morir».
Indicó que hoy lo visitó personal de la Comisión de Derechos Humanos pero solo escucharon la versión de los médicos del hospital y de las autoridades del Cefereso, pero no oyeron las demás operaciones terapéuticas.
«No nos permiten tener una segunda opinión, hemos consultado ya a muchísimos especialistas que nos refieren que la operación que quieren hacer es muy delicada y su vida corre peligro», indicó.
