*El secretario de Gobierno, Ludwid Marcial Reynoso propone retomar la ruta del diálogo y dejar de lado cualquier confrontación
*Avanzar en la regulación, la vía más adecuada para evitar la infiltración, sostiene el secretario de Gobierno
ROGELIO AGUSTÍN/SNI
AYUTLA, GRO.
En la cabacera municipal de Ayutla de los Libres, el secretario general de Gobierno, Ludwid Marcial Reynoso Núñez solicitó a los comisarios, comandantes y dirigentes de la autodefensa de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) dejar la ruta de la confrontación, buscar acuerdos por la vía del dialogo y avanzar en el proceso de la regulación de las policías ciudadanas, cuya existencia, admitió que “no se puede ignorar”.
Reynoso Núñez acudió a dicho municipio ubicado en la Costa Chica, donde la UPOEG surgió a la luz pública en enero de 2013 como Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadana (SS y JC), acompañado del director general de Gobernación, Francisco Rodríguez Cisneros y del subsecretario de Desarrollo Político, Oscar Chávez Rendón.
Los comisarios y comandantes de la policía ciudadana de la UPOEG estuvieron encabezados por el principal dirigente de la organización, Bruno Placido Valerio, quien fuera también promotor del proyecto que a finales de los 90s le dio vida a la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC).
En la apertura de la intervención, el responsable de la política interna dijo a los representantes de la Unión de Pueblos que “el gobierno del estado no es su enemigo”.
Explicó: “Quienes estamos ahí, en el gobierno, somos hombres y mujeres que sufrimos el tema de la violencia y de la injusticia, pues durante muchos años también trabajamos en condiciones adversas para llegar a ser gobierno, por eso no nos espanta el dialogo ni le tememos a acercarnos a la gente”.
Reconoció que en Guerrero, como en muchas partes del país existe un pueblo dolido, que durante mucho tiempo ha sentido la lejanía de las autoridades.
Derivado de la confrontación generada la semana pasada en Marquelia y luego en Acapulco, la gobernadora Evelyn Salgado Pineda dio la indicación de que parte de su equipo buscara el acercamiento con los dirigentes de la UPOEG, para tratar de alcanzar un acuerdo que disminuya la tensión.
En la explicación, Ludwid Marcial recordó que hace ya varias semanas, la titular del Ejecutivo local retiró una iniciativa de ley que se había presentado en materia de derechos y cultura indígenas, para permitir que el asunto se discutiera en las comunidades interesadas.
“Lo importante es que surja una ley que se ajuste a la realidad, definitivamente no podemos legislar sin la intervención de las comunidades”, admitió.
Comunitarias,
una realidad
En esa parte sostuvo que la realidad es que en Guerrero existen existen policías comunitarias, algunas de ellas con muy buenos resultados, donde no se habla de abusos ni de (infiltraciones de la) delincuencia, en cambio, hay otras que “desgraciadamente, algunos de sus integrantes se han llegado a desviar del camino”.
Por eso, refirió que el reto que se tiene es que cada quien haga su parte, “de tal manera que si ustedes observan que la gente en la que confiaron ya sirve a otros intereses, pues así decirlo; este coordinador, comandante ya no le sirve a la sociedad, ya se desvió y nosotros tenemos la obligación de intervenir”.
Refirió que no es mala idea plantear una credencializacion de los elementos de la Policía Ciudadana, para efecto de que los pobladores puedan verificar quien sí está en el reglamento y quien no.
Indicó que no es correcto permitir que en las comunitarias anden muchachitos de 13 a 14 años.
Lo que manejó de manera permanente, fue el tono conciliador de la administración estatal: “El Gobierno no va a pelear con ustedes, venimos a generar acuerdos”.
Precisó: “Lo que venimos es a pedir que haya respeto, coordinación, no confrontaciones, hay que tener claridad en lo que nos toca a cada quien, porque debemos retomar las cosas con la UPOEG, hacer lo necesario para que no haya confrontaciones”.
El funcionario destacó que el de la seguridad es un tema sumamente doloroso, que afecta y preocupa a todas las familias.
Por esa razón, reconoció que a las comunitarias no se les puede borrar de un día para otro, pues solamente la UPOEG lleva ya casi diez años, en tanto que la CRAC está por alcanzar las tres décadas.
“Lo que venimos a plantear es que caminemos juntos, que busquemos un gran acuerdo y pues para quienes no estén en la disposición del dialogo, ya habrá otras consecuencias”, anotó.