El 90% de mujeres que se divorcian son denunciadas por delitos falsos
BALTAZAR JIMÉNEZ ROSALES
CHILPANCINGO, GRO.
Aun cuando no hay estadísticas oficiales o cuando menos concretas de la llamada violencia vicaria, se tiene conocimiento que en el país el 90 por ciento de las mujeres que desafortunadamente llegan a divorciarse de sus parejas son denunciadas penalmente por delitos falsos, inventados, con el fin de despojarlas de sus hijos.
Lo más grave de esto, expresó Jennifer Seifert, co-fundadora del Frente Nacional Contra Violencia Vicaria, es que en los procesos penales contra estas mujeres que sufren la violencia vicaria, los maridos cuentan con el apoyo de los jueces que llevan las causas.
Jennifer Seifert acompañó ayer a la diputada local Gabriela Bernal Reséndiz, presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género del Congreso del Estado, en la conferencia de prensa en la cual presentó la iniciativa de ley a través de la cual se pretende tipificar la violencia vicaria como un delito en la entidad.
Señaló que de acuerdo a las estadísticas que se tienen acerca de este tipo de violencia que sufren las mujeres, el 90 por ciento de las mujeres que llegan a divorciarse son denunciadas penalmente, pero lo más grave es que es por delitos que son inventados: “tenemos un alto índice de denuncias falsas, por lo cual incluso algunas ya comenzaron a revertirse, porque en muchos casos se trata de falsedad de declaraciones; a las mamás nos inventan violencia intrafamiliar, robos y fraudes, todo con tal que quitarnos a nuestros hijos”.
De esta manera, mencionó, los hombres que cometen este tipo de violencia ganan ventaja, porque son situaciones que toman tiempo para planear, además de que todo eso lo ingresan al tema familiar, en un Juzgado Familiar, “por eso nos quitan a nuestros hijos por esos delitos que pesan en nuestra contra, además de que los niños nunca son presentados ni llevados ante las autoridades y que en muchas ocasiones son sustraídos en las convivencias además de que muchos de los padres son deudores alimentarios”.
Otro problema, mencionó es que muchas de estas madres violentadas tienen miedo denunciar sus casos y quienes se han acercado al Frente Nacional Contra Violencia Vicaria a solicitar asesoría o ayuda “nos piden que no demos ni su nombre, no nos quieren mandar datos, porque son amenazadas o incluso hay quienes todavía siguen en el matrimonio y son amenazadas con que les van a quitar a sus hijos”.
Por si fuera poco, resaltó, cuando los casos llegan a los Juzgados, las mujeres se encuentran con que ya los jueces tienen un acuerdo con los maridos: “la corrupción es tremenda, hay tráfico de influencias, los procesos se dilatan e incluso tenemos conocimiento que a nivel nacional hay Ministerios Público que cobran hasta 50 mil pesos para poder levantar denuncias falsas; hay un juez en Nuevo León que le apodan “El Roba-niños”, porque sólo le quita niños a las mujeres, nunca le ha quitado la custodia a un hombre, aunque esto ya lo estamos viendo en toda la República”.
Recalcó que la mayoría de los hombres que cometen este tipo de violencia contra las mujeres fueron maridos o papás irresponsables en lo económico que la única forma que tienen de quitarle sus hijos a sus esposas es a través de denuncias penales falsas.