*El asesinato del director del portal PM Noticias, marcó un desplazamiento masivo de reporteros igualtecos por amenazas de la delincuencia y silenció la zona donde actualmente se impuso la autocensura para sobrevivir
EZEQUIEL FLORES CONTRERAS
PROCESO/CDMX
El informe del gobierno federal sobre el caso Ayotzinapa sostiene que el reportero Pablo Morrugares Paraguirre, ejecutado el 2 de agosto de 2020 en la ciudad de Iguala, es uno de los 26 personajes claves que han sido asesinados en los últimos ocho años porque tenían información sobre la masacre y desaparición de los 43 normalistas en septiembre de 2014.
Las muertes
relacionadas
El asesinato del director del portal PM Noticias, marcó un desplazamiento masivo de reporteros igualtecos por amenazas de la delincuencia y silenció la zona donde actualmente se impuso la autocensura para sobrevivir y como consecuencia, actualmente no existe una cobertura informativa en la región.
Del 14 de octubre de 2014 al 24 de mayo de este año, han fallecido y asesinado a 26 personajes vinculados con el caso Ayotzinapa, entre ellos, 14 líderes de «Guerreros Unidos» como el fundador de la organización criminal Mario Casarrubias Salgado «El Sapo Guapo», quien murió el 26 de julio de 2021 por covid-19 en la cárcel.
Así como dos integrantes de la facción de «Guerreros Unidos» denominada «Gente Nueva», tres familiares de dirigentes de esta célula delictiva fragmentada y siete “testigos o personajes involucrados” con el caso Ayotzinapa, refiere el informe oficial presentado por el subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas el jueves pasado en Palacio Nacional.
Entre los siete “testigos” ejecutados, señalan el caso del reportero Pablo Morrugares, quien fue asesinado la madrugada del domingo 2 de agosto de 2020, junto a un policía estatal que había sido asignado de forma irregular como “escolta” del comunicador.
Ambas víctimas estaban departiendo en un bar ubicado en pleno centro de la ciudad de Iguala donde irrumpió un grupo armado y abrió fuego a mansalva.
Previamente, Morrugares Paraguirre había realizado una transmisión en su página de Facebook llamada PM Noticias, donde aseguró que el grupo delictivo de «Los Tlacos» que mantiene una confrontación con los remanentes de «Guerreros Unidos», presuntamente tenía “sometido” al exalcalde priista de Huitzuco, José Luis Ávila López, así como a taxistas y policías municipales de ese municipio de la zona norte de Guerrero.
“La gente está súper encabronada en Huitzuco porque la delincuencia, o sea Los Tlacos. La policía les servía a ellos y los taxis también pero no porque quisieran sino porque eran obligados. Huitzuco está súper caliente, el presidente (José Luis Ávila López), tiene negociaciones con los delincuentes y le ha ido mal”, expresó Pablo Morrugares en su transmisión y minutos después, fue ejecutado.
Hasta el momento, el crimen de Pablo Morrugares no ha sido esclarecido y ahora el informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (CoVAJ) lo ubica como una de las personas que fueron asesinadas por estar relacionadas con la desaparición de los normalistas.
Durante la administración del exalcalde perredista de Iguala, José Luis Abarca Velázquez (2012 a 2014), Pablo Morrugares se desempeñó como «asesor político» del edil que se encuentra preso por el caso de la masacre y desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Incluso, organizaba bailes y jaripeos en la ciudad de Iguala donde convocaba a cantantes de narco corridos antes y después de la tragedia de septiembre de 2014.
También, interpretaba corridos dedicados al excomandante de la Policía Ministerial estatal, Humberto Velázquez Delgado «El Huacho», presunto líder del grupo delictivo Guerreros Unidos y que fue ejecutado el 16 de junio de 2021 en la ciudad de Iguala.
Velázquez Delgado había sido acusado por familiares de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa como personaje clave en el caso porque era señalado como líder del grupo delictivo Guerreros Unidos pero nunca fue llamado a declarar por las autoridades ministeriales y el 16 de junio de 2021 fue ejecutado en la ciudad de Iguala.