*“Por estos delincuentes disfrazados no tengo a mi padre”, reprocha Hafid Palacios, tras quema de antimonumento a los 43
*Cierra: “Hace un año me lo quitaron y no dan la cara. Delincuentes, terroristas, personas sin causa, no sirven para la sociedad”, les reclama
DASSAEV TÉLLEZ/SNI
CHILPANCINGO, GRO.
Tras incendiar el antimomumento a los 43, Hafid Palacios, hijo del profesor de artes marciales mixtas, Jacinto Palacios Celino, muerto tras ser embestido por un autobús tomado por estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa se hizo responsable del hecho y sostuvo que la causa de dicha acción es muy conocida.
“No se desconoce la causa, soy hijo del maestro Jacinto Palacios Celino, que hace un año estos delincuentes de Ayotzinapa me arrebataron, por cierto, no dan la cara por su delito”, señaló el también instructor de artes marciales.
En un texto colocado en redes sociales, Hafid se niega a que los autores del incendio al antimonumento se queden en el anonimato, pues señala que su padre, el también multicampeón, nunca le enseñó a ocultar la cara ante los problemas.
“De favor compartan mi comentario, soy una persona sin padre, que lo recuerda a diario como su héroe y por estos delincuentes disfrazados de estudiantes no lo tengo a mi lado”, pide a los usuarios de plataformas digitales.
El profesor Jacinto Palacios viajaba procedente de la cabecera municipal de Tixtla, donde acompañó a la mamá de uno de sus alumnos para concretar la venta de un vehículo, ya regresaban a Chilpancingo a bordo de su automóvil tipo Sedán, marca Volkswagen cuando fueron embestidos por un autobús que invadió su carril en el libramiento Chilpancingo-Tixtla.
En el autobús viajaban estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, que siguieron su camino en otro camión, mientras que en la carretera el vehículo y el autobús quedaron envueltos en llamas.
Jacinto Palacios tenía 47 años de edad, era originario de Mártir de Cuilapan y junto con Afit le sobreviven tres hijos.
En su trayectoria fue dos veces Campeón Nacional de Full Contact Amateur; en los años 1989–1990 también campeón estatal en el Tercer Torneo Universitario abierto de Karate-Do en Chilpancingo, en 1989 recibió la medalla de plata en el torneo “Guantes de Oro”, en la ciudad de Chilpancingo, en 1991, fue Primer lugar panamericano en la ciudad de Tijuana en 1991 y Sub campeón panamericano en el 2002.
El profesor ostentaba con certificación que lo acreditó como cinturón negro segundo grado en Artes Marciales Mixtas y certificación como coach nacional en la disciplina marcial.
Más tarde, de manera más directa el joven artemarcialista publicó en su red social: “Ahora no saben por qué se les repudia, devuelvan a mi padre vivo cabrones”.
Cierra: “Hace un año me lo quitaron y no dan la cara. Delincuentes, terroristas, personas sin causa, no sirven para la sociedad”.
