*La elección de dirigente habrá de repercutir en el Congreso, asume Alfredo Sánchez Esquivel
*En política se pueden tener diferencias, pero al final las mayorías son las que deciden y en este caso, los resultados son muy claros, dijo
*Agregó: “Decir que alguien gana o alguien pierde, sería como decir que hay una guerra entre grupos, cuando aquí lo importante es que inicie un proyecto que tiene que dar buenos resultados y estos se deben reflejar en los comicios de 2024”
ROGELIO AGUSTÍN/SNI
CHILPANCINGO, GRO.
El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso local, Alfredo Sánchez Esquivel sostuvo que al seno de Morena-Guerrero no existe una guerra entre grupos políticos, por eso es que no se puede hablar de ganadores o perdedores en el proceso de renovación de la dirigencia de dicho instituto político.
Sánchez Esquivel, reconoció que la elección de dirigente estatal inevitablemente tendrá una repercusión en el Poder legislativo de Guerrero, aunque todavía no sabe si será positiva o negativa.
De inicio, el presidente de la Jucopo reconoció que ya era necesario tener un Consejo y Comité Ejecutivo Estatal (CEE) debidamente integrados en Guerrero, si se toma en cuenta el tiempo que pasó con un secretario general con funciones de presidente, que estaba reñido con una delegada especial, para luego terminar con otro delegado del Comité Nacional, que no tenía mucha movilidad ni presencia real ante la militancia.
Reconoció que su compañero diputado, Jacinto González Varona tiene ahora una gran responsabilidad, que consiste en buscar la generación de acuerdos y de consensos en Guerrero, “para que a Morena le siga yendo bien y corrija los errores que se han cometido en los lugares donde no se ha podido ganar”.
Fue cuestionado sobre el balance que tuvo el frente emergente, que integraron él en su calidad de líder del Congreso, junto con las alcaldesas de Acapulco y Chilpancingo; Abelina López Rodríguez y Norma Otilia Hernández Martínez, respectivamente.
“Yo he insistido hasta el cansancio; no se integró ningún frente o ningún frente, hay reuniones de compañeros, la participación fue política, ahí están los nombres sobre la mesa y somos respetuosos”, anotó.
Dijo que en política se pueden tener diferencias, pero al final las mayorías son las que deciden y en este caso, los resultados son muy claros.
Ante la pregunta de quién es el que ganó en la renovación de dirigentes, Sánchez Esquivel aseveró: “Yo creo que se dio un paso que era muy necesario ¿Quién gana? Pues tiene que ganar Morena, porque al final de cuentas, al tener garantizar un actor al frente del partido, es a quien se tiene que pedir cuentas de lo que ocurra, de lo que avance el partido y las estructuras”.
Y cerró esa parte con lo siguiente: “Decir que alguien gana o alguien pierde, sería como decir que hay una guerra entre grupos, cuando aquí lo importante es que inicie un proyecto en donde a largo plazo tiene que dar buenos resultados y estos se deben reflejar en los comicios de 2024”.
Recordó que en las próximas elecciones federales, el presidente Andrés Manuel López Obrador ya no estará en las boletas, de tal manera que se tiene que trabajar en la fortaleza interna del partido, para que dicha ausencia no tenga un peso definitivo.
Cuestionado sobre las repercusiones que puede tener en el Congreso, la elección de dirigente de partido, Alfredo Sánchez Esquivel reconoció que de manera inevitable eso sucederá.
“Yo lo he dicho coloquialmente; todos los caminos llevan al Congreso, pero puede ser que esa repercusión sea positiva o negativa, no se sabe, todo se tiene que ver con el avance del tiempo, en función de ciertas circunstancias”, anotó.
Recordó que el Congreso tiene su vida interna, donde sus integrantes son respetuosos de las decisiones que tome la dirigencia del Morena, aunque una vez definida su dirigencia, se tiene que buscar la comunicación para lograr una reconciliación verdadera.