Huye de México el activista Ramón Verdugo; pide asilo en Estados Unidos

QUADRATÍN CHIAPAS
SAN FRANCISCO, CA.

El activista y director del Albergue para migrantes “Todo por Ellos”, José Ramón Verdugo Sánchez huyó de México y solicitó asilo político en Estados Unidos por temor a que lo maten.

Verdugo Sánchez, que en el 2011 instaló un albergue para niños migrantes no acompañados en la ciudad de Tapachula, ubicada a unos 20 kilómetros de la frontera con Guatemala; dijo que huyó de México por temor a ser asesinado por autoridades mexicanas en contubernio con grupos del crimen organizado.

Con el apoyo de las organizaciones Proyecto Florence, Ayuda Humanitaria de Comedor “Kino”, Casa Alitas, así como la iglesia episcopal y Evangélica de Los Ángeles, California el activista preparó la huida a Estados Unidos, en donde se entregó a las autoridades migratorias el pasado viernes, quienes en forma inmediata lo liberaron para que inicie el proceso legal de asilo afirmativo. 

El acoso de autoridades, contra él y su albergue inició en el año 2013, cuando en el mes de febrero denunció a un grupo de agentes de la Policía Municipal que operaban una red de prostitución, entre ellos menores de edad, que obligaban a sexoservidoras mexicanas y extranjeras a pagarles una cuota diaria a cambio de protección. 

“Los policías extorsionaban a sexoservidoras, les cobraban piso y le quitaban lo robado a los delincuentes, lejos de procesarlos”, recordó Verdugo Sánchez.

El defensor de los derechos humanos, emprendió acciones de protesta junto con las mujeres que ejercían la prostitución en el primer cuadro de la ciudad; quienes acusaban a la policía municipal de Tapachula de golpearlas, maltratarlas, extorsionarlas, de abuso sexual y golpearlas.

La Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos contra Inmigrantes detuvo a cinco policías municipales de Tapachula, involucrados en el delito de trata de personas, extorsión y abuso de autoridad, mientras que dos más se dieron a la fuga.

Seis meses después de la denuncia contra la policía municipal de Tapachula, en el mes de agosto, un grupo especial de efectivos de la entonces Policía Federal portando armas de grueso calibre y cubiertos del rostro con pasamontañas, sin orden de cateo ingresaron al refugio e intentan “levantar” a Verdugo Sánchez, acción que fue impedida por el personal y los extranjeros.

Los hechos fueron denunciados ante las autoridades correspondientes, pero debido a amenazas y acoso desde el anonimato, Verdugo Sánchez huye de Chiapas y en enero del 2014 reanuda actividades en su albergue acuerpado por representantes del Alto Comisionado de las Naciones Unidas (ONU), iglesia católica, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), entre otros organismos que solicitaron medidas cautelares para preservar la vida del activista y de sus colaboradores.

En el 2014, Jessye Verdugo Rivera, hija del activista, solicitó asilo a Estados Unidos luego de que un grupo de hombres intentaron matarla atropellándola.

Ese mismo año, Verdugo Sánchez fue incorporado al Mecanismo para la Protección de Defensores de Derechos Humanos y Periodistas, de la Secretaría de Gobernación (SG) otorgándole dos custodios de 24 por 24 horas.

El activista, también realizó acciones de protesta en contra de delegados y personal del Instituto Nacional de Migración (INM) desde el 2018, cuando se agudizó la crisis migratoria; a quienes acusó de diversos actos de corrupción como la venta de documentos oficiales, mal trato, abusos de autoridad y de estar coludidos con grupos de traficante de personas.

El 15 de abril del 2019, Guardias Privados del Centro de Atención Integral del Tránsito Fronterizo ubicado en el municipio de Huixtla, golpearon al activista cuando documentaba el encarcelamiento de un grupo de cubanos en instalaciones del INM, donde los mantenían hacinados y en condiciones inhumanas, según denunció en su momento.

En el mes de marzo del 2021, el Mecanismo para la Protección de Defensores de Derechos Humanos y Periodistas retira a Verdugo Sánchez las medidas cautelares y los custodios, debido a que consideraba que ya no había amenazas graves en su contra y por estar retirado – por enfermedad- del activismo.

Sin embargo, a mediados del mes de julio del presente año, el activista recibe una nueva amenaza de muerte supuestamente de integrantes de la pandilla transnacional Mara Salvatrucha 13.

“El supuesto pandillero amenaza a uno de mis colaboradores para que le informe el día y la hora en que salgo del albergue y, de no hacerlo, también esa persona sufrirá las consecuencias”, explica.

Abundó que, ante esta situación, se vio obligado a refugiarse en diversos estados del país, ya que no cuenta con la protección del mecanismo.

Refiere que actualmente, sus cuentas de redes sociales fueron hackeadas para saber su paradero y considera que autoridades mexicanas en contubernio con criminales quieren asesinarlo, por eso huyó a Estados Unidos.