Piden migrantes que Alondra García Lucatero sea titular de la Semai
BALTAZAR JIMÉNEZ ROSALES
ZÓCALO/CHILPANCINGO, GRO.
Algarabía provocó entre las organizaciones de migrantes que hay en los Estados Unidos de Norteamérica la renuncia de Celeste Mora Eguiluz a la titularidad de la Secretaría del Migrante y Asuntos Internacionales (Semai) e hicieron votos porque en el cargo quede en definitiva —y no sólo como encargada— Alondra García Lucatero, con quien sí tienen un buen entendimiento, pero además es la que realmente ha trabajado en esa dependencia.
Gaudencio Vélez Catalán, presidente de la Federación Guerrerense Binacional, fue categórico al señalar que la decisión de Mora Eguiluz de renunciar a la Semai fue “muy acertada”, porque nada hizo por tener un acercamiento entre el nuevo gobierno en el estado de Guerrero y las organizaciones de migrantes, que seguimos abandonados.
Señaló que lo que han tratado las organizaciones de guerrerenses que hay en los EUA es tener una buena relación con el Gobierno del Estado, lo cual “hemos buscado de mil maneras, porque al fin de cuentas tenemos que trabajar de la mano”.
En este sentido, reiteró que en todo el tiempo que Celeste Mora fungió como titular de la Semai jamás se dignó a tener un acercamiento con las organizaciones de migrantes y “la única persona que siempre estuvo atenta y tuvo la interlocución con nosotros es la Licenciada Alondra (García Lucatero) y en determinado momento trató de hacer el trabajo en esa dependencia que estaba en el abandono total”.
Incluso mencionó que por el rechazo que les manifestaba Celeste Mora, con quien han tenido constante comunicación es precisamente con García Lucatero, sobre todo a partir de que se reactivó el Programa 2 X 1 de Migrantes, por lo cual expresó que “sería excelente que quedara como secretaria la Licenciada Alondra, aunque uno nunca sabe, y como no nos consultan a nosotros, es peor”.
Sí dijo que sería bueno que las organizaciones de Migrantes fueran tomadas en cuenta a la hora de designar al titular de la Semai, porque es la persona con la que van a trabajar, porque “a veces nos imponen a otras personas que no sabemos ni quiénes son ni qué tanto conocimiento tienen de la problemática de los migrantes”.