*Claudia Sheinbaum ha logrado posiciones importantes al interior de Morena, al tiempo que figura como la mejor posicionada de la 4T rumbo al proceso presidencial
SINEMBARGO
CIUDAD DE MÉXICO.
“Está embajada todavía no tenemos el día fijo cuando se vaya abrir, pero ojalá con la ayuda de la Presidenta Claudia Sheinbaum, el Gobierno aquí y los vecinos vamos a llegar a un tiempo donde sí se pueda abrir”, fueron las palabras con las que tropezó el Embajador estadounidense Ken Salazar al recorrer el lunes pasado, junto a la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, las obras de la nueva sede de la representación diplomática de Estados Unidos en México.
El episodio lejos de pasar desapercibido generó fuertes reclamos contra Salazar, a quien tanto la oposición como integrantes de la 4T calificaron de “injerencista”. En su defensa, el Embajador estadounidense explicó que así se llamaba a los alcaldes en su país, no obstante sus palabras han dado paso a todo tipo de interpretaciones en torno a las aspiraciones de Claudia Sheinbaum Pardo, la principal contendiente de Morena para 2024, que en las últimas semanas se ha volcado a apuntalar su candidatura a través de recorridos por el país y de una participación más visible al interior del partido guinda.
La manera en la que se ha conducido Sheinbaum Pardo ha llevado a la oposición a denunciar ante las autoridades electorales presuntos actos anticipados de campaña. Hasta el momento el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) no ha encontrado evidencia de esto, pero al mismo tiempo la Jefa de Gobierno se ha posicionado en encuestas y al interior del partido como una de las dos principales cartas fuertes del morenismo rumbo a 2024, la otra es el Canciller Marcelo Ebrard Casaubón, quien a diferencia de la mandataria capitalina, no es miembro fundador de Morena.
Otra de las diferencias entre Sheinbaum y Ebrard ha sido las posiciones que ha ido ocupando la Jefa de Gobierno al interior del partido oficialista. Hace una semana, en su Tercer Congreso Nacional el Comité Ejecutivo, grupo directivo permanente, quedó en manos de representantes de gobernadores, incluida Claudia Sheinbaum, en tanto que el Canciller quedó relegado con una mínima participación.
Entre los consejeros morenistas designados este 17 y 18 de septiembre están Carlos Ulloa Pérez, Secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda de la actual administración de la ciudad; Rigoberto Salgado, titular de la Secretaría de Inclusión y Bienestar Social, y Diego Alejandro Villanueva González, director ejecutivo de Participación Ciudadana en Coyoacán.
Además de los alcaldes de Gustavo A. Madero, Francisco Chíguil Figueroa; Berenice Hernández, de Tláhuac, y Raúl Armando Quintero Martínez, de Iztacalco. Mientras que el nuevo Secretario de Cultura y Artes del Comité Ejecutivo Nacional de Morena (CEN) será Tomás Pliego, exlíder de Morena en la capital y un político cercano a la mandataria Sheinbaum Pardo.
Junto a las posiciones que cercanos a ella han tenido al interior del partido, Sheinbaum se ha consolidado en la mayoría de las encuestas rumbo a 2024. Por ejemplo, en la última medición de El Universal, publicada el 31 de agosto pasado, la Jefa de Gobierno aventaja con un 31 por ciento de respaldo al secretario de Relaciones Exteriores, que tiene 29 por ciento, en la contienda interna del partido. El Financiero también sitúa a la mandataria de la Ciudad como la mejor colocada al interior de Morena.
En la última medición de Reforma, del 2 de septiembre, Claudia Sheinbaum luce como la aspirante de Morena más sólida al obtener una ventaja de entre 25 y 30 puntos en distintos escenarios hipotéticos, con una respaldo de entre el 43 y el 49 por ciento, en el que se mencionan a diferentes aspirantes de la oposición.
Las mediciones de Enkoll y Massive Caller también ubican a la Jefa de Gobierno como la principal aspirante de la 4T. En la primera medición, del 29 de agosto, Sheinbaum aparece con una preferencia efectiva del 48 por ciento frente al 36 por ciento de Ebrard; en la otra encuesta la Jefa de Gobierno tiene un respaldo del 39.9 por ciento y el Canciller del 35.6 por ciento.
Ante los números en las encuestas y el respaldo que le ha dado el Presidente Andrés Manuel López Obrador, han surgido señalamientos dentro de Morena, como los del Senador Ricardo Monreal, y en menor medida del Canciller Marcelo Ebrard que han pedido “piso parejo” en la designación del candidato oficialista.
En una entrevista que dio a las periodistas Daniela Barragán y Romina Gándara, durante el programa Café y Noticias que se transmite en SinEmbargo Al Aire, Sheinbaum Pardo pareció llamar a la cordura cuando falta un año para que Morena realice la o las encuestas que definirán quién será el candidato o candidata de izquierda a la Presidencia 2024.
“Yo ya declaré que había que tener la cabeza fría porque yo confío en mi partido. Sé que se van a hacer bien las cosas y finalmente la manera que nuestro partido tiene para poder definir a un candidato o candidata en su momento que se presente para una diputación, para una presidencia municipal, para una gubernatura o para la Presidencia de la República, son las encuestas”, dijo.
El “fuego amigo” también ha arreciado en Morena con la integración al equipo de Sheinbaum del analista y consultor Antoni Gutiérrez-Rubí, quien este año llevó a Gustavo Petro a posicionarse como el primer Presidente de izquierda en Colombia, y que antes lo hizo con Alberto Fernández, en Argentina.
Monreal ha acusado que parte de la estrategia de Antoni Gutiérrez-Rubí consiste en desprestigiarlo y responsabilizarlo de la derrota de Morena en la Ciudad de México en la elección de 2021. “Los asesores extranjeros que tienen a su disposición insisten en eso. ‘Monreal es un traidor’. Ese es el mote de la campaña de ellos para liquidarme (rumbo a 2024) pero es una estrategia del Gobierno de la Ciudad”, acusó el Senador morenista el pasado 5 de septiembre en entrevista con Carmen Aristegui.
En respuesta, la Jefa de Gobierno descartó entrar en polémicas con sus compañeros de partido. Así sucedió en su campaña en la Ciudad de México, en donde evitó al mínimo confrontarse con sus contrincantes y enfocarse en su candidatura. Eso le funcionó en 2018 para llegar a la Jefatura de Gobierno de la capital. Ahora, en la contienda para la Presidencia Sheinbaum sigue apuntalando su imagen en el país desde la cima en las encuestas y con un control importante dentro de Morena.