JESÚS GUERRERO
AMAPOLA PERIODISMO
Los tres integrantes del Consejo Indígena y Popular del Estado de Guerrero Emiliano Zapata (Cipog-EZ) que fueron asesinados a balazos presuntamente por miembros del grupo criminal de Los Ardillos en Chilapa son velados en la explanada de la iglesia de la comunidad nahua de Alcozacán.
Decenas de mujeres, hombres y niños están fuera de la iglesia para acompañar a los familiares de Adán Linares Silverio, Moisés Cuapipisteco y Guillermo Hilario Morales, las víctimas del ataque, quienes serán sepultados mañana (martes) en el panteón de la comunidad, que también pertenece al municipio de Chilapa.
Ayer por la mañana, los tres cadáveres les fueron entregados a sus familiares en el Servicio Médico Forense (Semefo) en Chilpancingo.
De regreso a su comunidad, los familiares de los tres asesinados y miembros del Cipog-EZ fueron custodiados por elementos de la Guardia Nacional (GN) y la Policía Estatal (PE).
Jesús Plácido Valerio, dirigente de esta organización que también cuenta con su policía comunitaria, dijo que del 2015 a la fecha ya son 48 personas de las comunidades de la Montaña baja asesinadas por el grupo delictivo de Los Ardillos.
Dijo que sus tres compañeros asesinados a tiros en las inmediaciones de la comunidad de Xochimilco, Chilapa, el pasado sábado en la tarde, participaron en la protesta que realizaron a la orilla de la carretera federal Chilpancingo-Tlapa, en donde detuvieron al presidente Andrés Manuel López Obrador para pedirle medidas de seguridad y la detención de los integrantes del grupo grupo criminal.
La presencia de Los Ardillos en Montaña baja no es sólo un señalamiento de este organización, las propias autoridades desde hace años han aceptado que este grupo criminal tiene presencia en la zona, como tampoco es ignorado de manera institucional que están asociados de manera personal al diputado perredista Bernardo Ortega Jiménez, quien es hermano de los líderes, Celso e Iván Ortega Jiménez.