Hay en el Poder Judicial de Guerrero ex jueces corruptos que como magistrados

*Muchos vendieron la justicia, acusa el abogado Pedro Ramírez Millán

*El sistema de justicia penal acusatorio no está dando los resultados esperados, dice

*Las plazas laborales en el Poder Judicial de Guerrero son para familiares de políticos y magistrados

MARCIAL CAMPUZANO
CHILPANCINGO, GRO.

La administración y la aplicación de la justicia en Guerrero está dejando de ser un gran negocio para los jueces, por la vigilancia que se ejerce en sus actuaciones, dijo el ex juez penal y abogado litigante Pedro Ramírez Millán, quien expuso que el sistema de justicia penal acusatorio no está dando los resultados esperados, y que con su aplicación hay una inmediata privación de la libertad de presuntos infractores de la ley, a veces sin pruebas.

El abogado señaló que la práctica ha demostrado que el nuevo sistema de justicia penal acusatorio, no está dando los resultados esperados por los que imaginaron esa nueva forma de impartir justicia.

Consideró que el sistema penal acusatorio en ocasiones se torna peligroso, dando desventajas a las personas acusadas de cometer delitos –inculpados-, quienes “con un elemento medio obscuro son vinculados a procesos y son encarcelados; antes había la oportunidad de que consignando la averiguación previa había un término en el que se preparaban las pruebas y desahogarlas logrando la libertad de los acusados”.

Ramírez Millán dijo que sin elementos de prueba contundentes, muchas personas han sido vinculadas a procesos penales. Como ejemplo citó a la ex secretaria de Desarrollo Social federal Rosario Robles, y el ex procurador general de la República Jesús Murillo Káram, “que hace suponer que ese sistema sirve para consumar venganzas políticas”.

La imparticipación de justicia no necesita de nuevos sistemas, lo que se requiere es tener personal capacitado y honesto para impartir justicia, “no crear nuevas leyes o sistemas, tiene que haber una buena selección de los que aplicarán justicia”, agregó.

El abogado dijo que una de las ventajas, si se puede decir, que generó el nuevo sistema de justicia acusatorio, es que “ya no tanto se vende la justicia en Guerrero por parte de los jueces, antes se vendía mucho la justicia, aunque sigue el influyentismo, pero el mercantilismo de la justicia disminuyó”.

Pedro Ramírez afirmó que en el Poder Judicial de Guerrero hay varios magistrados que cuando fungieron como jueces vendieron la justicia, en aquellos tiempos en que hubo mucha ladronería en los jueces que ha disminuido.

Aclaró que la venta de la justicia se da más en la materia penal. El secuestro representaba una mina para los jueces, “porque soltaban la buena lana los secuestradores para recuperar la libertad”.

“Yo conocí a tantísimos jueces ladrones que ahora son magistrados, los conozco bien, pero repito: la justicia no es cuestión de leyes, no es cuestión de sistemas, es cuestión de la persona que llega al cargo, porque se dan casos en que llegan personas sin estar bien preparadas; llegan a los cargos sólo por ser familiares de un magistrado o pariente de un alto funcionario”, indicó.  

Mucho se ha dicho que el Tribunal Superior de Justicia debe llamarse Tribunal Familiar de Justicia, porque hay magistrados que tienen trabajando en esa área de gobierno a sus hijos, sobrinos y hermanos, entre otros parientes”.