Reactivan relaciones productores con la Secretaría de Agricultura estatal

*Acordaron reanudar sesiones del Consejo de Desarrollo Rural para delinear políticas de apoyo al campo

*Insisten organizaciones en reactivar la industrialización de productos agrícolas

MARCIAL CAMPUZANO
CHILPANCINGO, GRO.

Las organizaciones de Productores del sector agropecuario acordaron este miércoles con el secretario de Agricultura Alejandro Zepeda Castorena, reactivar las sesiones del Consejo Guerrerense de Desarrollo Rural Sustentable, para definir acciones y políticas que permitan reactivar el próximo año las inversiones en el campo, con el presupuesto que tendrá asignado la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural (Sagadegro).

El dirigente de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos Evencio Romero Sotelo, señaló que los dirigentes campesinos se congratularon porque hay un cambio radical en el trato que el nuevo secretario de Agricultura tiene con las organizaciones de productores, “que solo buscan que los recursos públicos alienten la producción de alimentos con la generación de ingresos económicos para las familias campesinas”.

En reunión celebrada en la Sala de Juntas de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural de Guerrero,  el funcionario estatal y alrededor de 20 líderes de organizaciones campesinas, acordaron celebrar el 14 de diciembre la segunda sesión del año del Consejo Guerrerense de Desarrollo Rural Sustentable en la capital del estado, con la aclaración de que la fecha podría moverse porque se requiere la presencia de la gobernadora Evelyn Salgado en su calidad de presidenta del Consejo.

“El compromiso que hizo el secretario de Agricultura, fue que le informará a la gobernadora la fecha tentativa para celebrar la sesión del Consejo de Desarrollo Rural, para que de acuerdo a su agenda esté con nosotros, tomando en cuenta que no asistió a la primera sesión “por la confrontación que propició el ex secretario de Agricultura Jorge Peto Calderón con las organizaciones de productores”, indicó.

A diferencia del anterior secretario de Agricultura “que siempre satanizó a las organizaciones campesinas”, Alejandro Zepeda dijo estar dispuesto a que haya coordinación para que mejore la atención al campo, “y juntos diseñamos la propuesta de orden del día que podría desahogarse en la sesión del Consejo de Desarrollo Rural”, indicó.

Los líderes de las organizaciones del sector agropecuario se pronunciaron porque el presupuesto que el gobierno del estado aplicará al campo el próximo año, “sea para proyecto que sirven al campo guerrerense, y no se limiten a la entrega de mulitas y rollos de alambre de púas”, señaló.

Las organizaciones campesinas propusieron la industrialización de productos del campo que está frenada desde hace más de 40 años, para sacarle valor agregado al mango, al coco, al limón, y que se reactive la exportación de café guerrerense a Alemania como ya ocurrió dejando beneficios a los cafeticultores

Evencio Romero manifestó que es necesario acabar con el discurso demagógico, “de que ocupamos los primeros lugares en la producción de coco y mango, y que somos los chingones en la producción de café, que de nada sirve porque somos pendejos para vender esos productos”.

Propusieron al titular de la Sagadegro el almacenamiento de maíz en silos, y que la paraestatal federal Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) actúe con honestidad y transparencia, y que pague la tonelada de ese grano básico de acuerdo a las cotizaciones de la bolsa de valores de Chicago.

En la reunión, el presidente del Consejo Estatal del Maíz propuso que con recursos adicionales, el gobierno del estado compre una parte de la producción maicera de la cosecha que habrá en este año, para abastecer con esquemas de comercialización a los industriales de la masa y la tortilla para que disminuya el precio de esos alimentos básicos, esto debido a que Segalmex se ha negado a venderles maíz a los productores de tortillas.

Informó que el Consejo Guerrerense de Desarrollo Rural Sustentable hará una propuesta al gobierno federal, para que sean los estados los que compren las producciones de maíz para que abastecer a las comunidades y a los industriales de la masa y la tortilla.