JUAN MANUEL MOLINA
QUADRATÍN GUERRERO
Integrantes de la autodenominada policía ciudadana de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en Buenavista de la Salud, Chilpancingo, denunciaron que durante la madrugada fueron objeto de un desarme por parte de personal del Ejército y policías estatales.
De acuerdo con las versiones, el hecho ocurrió alrededor de las 3 horas en la base de vigilancia que mantienen sobre la carretera México-Acapulco.
Los soldados y policías, alrededor de 20 agentes, ingresaron caminando a la base y cortando cartuchos despojaron a los guardias civiles de cuatro armas largas y una corta. El dispositivo duró apenas unos 10 minutos, comentaron.
Los inconformes descartaron bloqueos a las vías de comunicación, para no afectar a la población, pero llamaron al gobierno federal a intervenir y responsabilizaron al Estatal ante algún tipo de ataque.
Uno de los integrantes mencionó que el año pasado se realizó un dispositivo similar y días después, el grupo de guardias fue atacado a balazos por un grupo criminal.
El año pasado, la base de la UPOEG en Buenavista fue objeto de tres ataques, con un total de cuatro bajas, y diversos daños.
Ahora, a 10 años de haberse levantado en armas, son testigos de una embestida del gobierno estatal hacia su movimiento que no busca más que garantizar seguridad a su comunidad, mencionaron.