La FGE no ha detenido a los asesinos de la menor Paola Michelle

*“Exijo justicia”, clama su mamá

*»Ella solo iba a vender pasteles y la mataron por equivocación», indica la señora

AGENCIA IRZA
CHILPANCINGO, GRO.

Este jueves se cumplió una semana de que Paola Michelle, de 14 años, estudiante de la Escuela Secundaria Federal Antonio I. Delgado (ESFAID), fue asesinada durante un ataque en un billar de esta capital, donde el objetivo de los agresores era otro joven que dejaron herido, caso del que la Fiscalía General del Estado (FGE), no ha dado resultados y sigue sin detener a los asesinos.

Su mamá, Brenda Valadez Espinoza, en entrevista exigió “¡justicia!” y urgió a la FGE que dé resultados. «Ella solo iba a vender pasteles y la mataron por equivocación», dijo la señora.

Con base al reporte ministerial, el pasado 29 de diciembre en el billar Club Deportivo Unisex, localizado en la avenida Benito Juárez, entre las calles Galeana y Galo Soberón y Parra, dos sujetos que bajaron de un vehículo, mientras otro los esperaba al volante, se metieron y realizaron el ataque a balazos con el objetivo de matar a un joven al que sólo dejaron herido, sin embargo asesinaron a la menor que se encontraba vendido rebanas de pastel.

Los sujetos salieron del billar, se subieron al vehículo y se dieron a la fuga.

«Exijo justicia porque a mi hija le quitaron su sueño de estudiar en el Colegio Militar», expresó la señora.

«Ella solo iba a vender pasteles y la mataron por equivocación», indicó doña Brenda, quien junto con su única hija, desde hace años empezaron a vender agua, refrescos y dulces en la banqueta de la avenida Juárez junto al edificio de gobierno «Vicente Guerrero».

El jueves 29 de diciembre por la tarde, Paola Michelle dejó por un rato el puesto de su mamá para agarrar su charola con pastelillos para irse a vender.

Del lugar donde estaba doña Brenda vendiendo está a poco más de una cuadra del billar «Club Deportivo Unisex» que fue donde Paola se metió a vender sus pastelillos.

«Alguien de aquí de los compañeros (vendedores) que escuchó los balazos me preguntó dónde estaba mi hija y le dije que se había ido a vender sus pasteles», relata Brenda.

Cuenta que llegó corriendo al billar y alguien le dijo que su hija estaba adentro herida y la charola tirada en el piso.

«Me metí, la vi ensangrentada, la abracé y noté que estaba viva; grité por una ambulancia, pero llegó tarde”, recordó doña Brenda.

El viernes 30 Paola Michelle fue despedida por sus compañeros de la Escuela Secundaria Federal Antonio I. Delgado.

Las vacaciones no fueron obstáculo para que la población estudiantil de esta escuela acudiera al centro educativo para darle el último adiós a Paola quien cursaba el tercer año y según sus compañeros ocupaba los primeros lugares en aprovechamiento académico.

Una mujer que conocía a Paola, contó que la menor estudiaba en la secundaria en el turno de la mañana y por la tarde le ayudaba a su mamá en la venta de dulces, aguas, galletas y pasteles.

«Era (Paola) muy buena estudiante y saliendo de clases se venía aquí con su mamá para apoyarla», relató la mujer.

Doña Brenda afirmó que a 7 días del asesinato de su hija, la Fiscalía General del Estado (FGE) sigue sin dar resultados para detener a los responsables.

«Solo me han dicho que a estas personas (los delincuentes) ya los tienen ubicados, pero eso es todo», refirió.

Mencionó que las personas que asesinaron a su hija le quitaron su sueño de estudiar en el Colegio Militar.

Paola se preparaba para hacer el examen de admisión en la preparatoria de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro) y después al Colegio Militar.

«Mi hija siempre preguntaba por los requisitos que se necesitaban para entrar al Colegio Militar», recordó doña Brenda, quien es madre soltera y su única hija era Paola Michelle.

Pese al reforzamiento de seguridad en Chilpancingo con elementos del Ejército, Marina y Guardia Nacional, la violencia sigue en aumento.