Madre y su novia matan a golpes a niño de 5 años; así agredían al menor
*La pareja enfrenta una condena de cadena perpetua por el asesinato de Lucio Dupuy en su casa dentro de una ciudad en Argentina
DIEGO RODRÍGUEZ
EXCÉLSIOR/CDMX
El asesinato de Lucio Dupuy, un niño de 5 años, a manos de sus dos mamás en la ciudad capital de La Pampa no sólo generó conmoción en la sociedad argentina, sino también hizo que un tribunal las declarara culpables de infanticidio y los fiscales buscan condenarlas a cadena perpetua.
El veredicto fue anunciado en una audiencia de la cual se ausentaron las dos mujeres —Magdalena Espósito Valenti (25), y su pareja, Abigail Páez (28)—, pero en la que estuvo presente el padre del niño, Christian Dupuy. Las sentencias serán anunciadas por el tribunal dentro de 15 días y el caso generó una polémica nacional sobre el sistema de custodia de niños de padres separados.
Cómo murió
Lucio murió el pasado 26 de noviembre de 2021 en la ciudad de Santa Rosa, capital de la región de La Pampa (a 500 kilómetros de Buenos Aires). Sus padres, Madgalena y Christian se habían disputado la custodia del niño en 2020, cuando vivían en Luján y se divorciaron un año antes —en la periferia de Buanos Aires—, la cual terminó ganando la madre ante un tribunal bajo el argumento que había mejorado su situación económica.
Para ese entonces, conoció a su pareja Abigail Paéz, con quien habría iniciado una relación desde 2018. Tras ganar la custodia a manos de una jueza, a la que acusaron de emitir su fallo por falsa perspectiva de género, la pareja se mudó a Santa Cruz. Sin embargo, las investigaciones del caso revelaron que la pareja consideraba a Lucio como «una molestia» para la estabilidad de ambas y quería deshacerse de él a toda costa, por la que empezaban discusiones entre ambas. «Lucio no me va a alejar de vos (ti)», decía en uno de los mensajes entre ambas.
En los chats, ellas detallaban formas para ocultar las lesiones de Lucio, como fingir que se caía de un árbol, e incluso, no lo mandaban a la escuela para evitar cualquier sospecha de maltrato contra el menor. Durante los 15 meses que Lucio estuvo con su madre y su segunda mamá fue sometido a constantes castigos, golpes y abusos sexuales. En ese lapso, tuvo cinco ingresos en diferentes centros médicos entre el 18 de diciembre de 2020 y 23 de marzo de 2021, por fractura de una muñeca y traumatismos en los dedos y un corte en la pera.
Fue hasta el sexto ingreso hospitalario (26 de noviembre de 2021, día del crimen) cuando las autoridades se dieron cuenta del caso, ya que tenía fracturas de cráneo y las roturas de dos costillas. Abigalí relató el momento en que Lucio fue trasladado al hospital, detallando que se estaba debilitando tras haberlo golpeado.
«Cuando llegué a la casa, lo vi a Lucio que se estaba mandando un moco. No importa qué, porque no viene al caso. Entonces lo tomé del brazo y le pegué varias pataditas en la cola. Fue todo muy rápido, no sé. Le pegué y no medí donde la verdad, ni sé por qué tampoco. No le encuentro una explicación todavía. Sé que lo lastimé, me di cuenta en el momento e intenté remediarlo.
Luego, lo alcé y lo llevé a la ducha porque pensé que iba a reaccionar. Él intentaba hablar, estaba consciente todavía […] «se estaba debilitando o desvaneciendo […] lo senté en la cama y me fui a buscar ropa a su pieza para cambiarlo, lo más rápido posible porque era una situación muy desesperante en la que no sabía cómo reaccionar, ni que hacer para que él se recomponga.
Cuando voy a buscar ropa para cambiarlo escucho un golpe y cuando vuelvo lo veo que él estaba tirado en el piso, sin reacción. De cara al piso. Ni siquiera había apoyado las manos. Como si estuviese desmayado, no sé. Entonces yo por el mismo temor lo toqué con el pie para ver si reaccionaba y vi que no tenía respuesta de él, entonces me acerqué y lo di vuelta, lo puse boca arriba y le dí respiración cardiopulmonar».
Para ocultar las agresiones a Lucio, las dos mujeres ponían canciones de rock, cumbia o cuarteto a todo volumen y hasta altas horas de la noche para acallar los gritos de Lucio que eran de tortura y castigos. Los fiscales denunciaron que el menor no era alimentado, pasaba frío, lo golpeaban en la panza al grado de provocarle vómitos, le pegaban en la cara, e incluso, fue víctima de agresión sexual al introducirle objetos vía anal.
El crimen, con detalles de maltrato y violencia física ventilados durante el juicio que horrorizaron a toda Argentina. La Fiscalía de Investigaciones Administrativas de La Pampa abrió sumarios de investigación a médicos, maestros y policías que pudieron alertar la situación del niño bajo custodia de la pareja. También, la jueza de familia provincial que decidió las sucesivas custodias a favor de Magdalena fue denunciada esta semana ante la justicia por falta de supervisión adecuada de la situación socioambiental del niño.
_¿Qué determinó el tribunal sobre la muerte de Lucio Dupuy?
_El tribunal declaró a Magdalena Espósito y Abigail Páez como culpables del asesinato de Lucio, y se espera que sean condenadas a cadena perpetua, fallo que se conocerá el próximo 13 de febrero. La madre fue acusada como autora material del «homicidio triplemente calificado por el ensañamiento, por la alevosía y por el vínculo», mientras que la pareja fue sentenciada por «homicidio calificado por ensañamiento y alevosía y por abuso sexual gravemente ultrajante».
En el último día del juicio, que fue el pasado 7 de diciembre, Madgalena apuntó contra el padre de su hijo diciendo que «se me critica a mí, pero no al progenitor, porque decirle padre le queda grande. A él se lo justifica cuando la responsabilidad era de los dos. Sin embargo, en todo momento se desentendió de la criatura». Sin embargo, Abigail Páez reconoció la agresión a Lucio y pidió perdón por sus acciones.
El caso reactivó en el Congreso de la Nación un proyecto ya conocido como la «Ley Lucio», que de ser aprobado obligará a capacitar en derechos de niños y adolescentes a los funcionarios locales, provinciales y nacionales de los tres poderes con el fin de evitar sesgos en ceder custodias a los padres.
Ramón Dupuy, el abuelo de Lucio, sostuvo al diario La Nación que la paz «no voy a tener nunca, porque voy a defender a todos los niños de la Argentina que pasaron lo mismo”. Su hijo estuvo en el juicio, pero no emitió declaraciones.
«A (mi hijo) Christian le dije que lo amo y lo voy a seguir protegiendo toda la vida y de la jueza no tengo nada que decir. (Valenti y Páez) Van a perpetua sin beneficio las dos y separadas, porque bastante estuvieron de luna de miel. La cárcel no es un hotel […] Esto va a marcar historia y estoy agradecido al país por todo lo que nos dieron”.