*A través de este video, realizado a 29 años del asesinato de Colosio en Lomas Taurinas, Tijuana, la defensa de Mario Aburto afirma que el asesinato del entonces candidato del PRI a la presidencia, está “íntimamente ligado” a una pugna al interior del partido
REDACCIÓN/APRO
CIUDAD DE MÉXICO
«Lo que se hizo fue hacer pasar a un inocente por culpable a base de torturas», asegura Mario Aburto Martínez. La declaración, forma parte de un video elaborado por su defensa al que Proceso tuvo acceso. En 1994 él fue señalado por el gobierno como el hombre que disparó contra Luis Donaldo Colosio el 23 de marzo.
A través de este video, realizado a 29 años del asesinato de Colosio en Lomas Taurinas, Tijuana, la defensa de Mario Aburto afirma que el asesinato del entonces candidato del PRI a la presidencia, está “íntimamente ligado” a una pugna al interior del partido, asevera que la sentencia a 45 años de prisión con un proceso “opaco y lleno de irregularidades”, y plantea: “¿De verdad el homicida fue un joven solitario?” Desde el encierro, Aburto afirma que se hizo pasar a un inocente por culpable a base de torturas.
El pasado 7 de marzo, un juez federal concedió un amparo a Mario Aburto, para que en seis meses la Fiscalía General de la República (FGR) concluya la averiguación previa que integra por los supuestos actos de tortura de los que dijo que fue víctima.
Asimismo, el juez Segundo de Distrito de Amparo en materia Penal, Antonio González García ordenó inscribir a la brevedad a Mario Aburto en el Registro Nacional del Delito de Tortura (RENADET).
El juez declaró que la FGR ha incurrido en dilación al investigar los actos de tortura, de los que Aburto dijo que fue víctima para confesar que cometió el crimen contra Colosio, pues la averiguación previa inició en agosto de 1994 y fue hasta el año 2022 que el fiscal general, Alejandro Gertz Manero, ordenó la creación de un equipo especial para investigar el caso del homicidio del excandidato.
Si se determina que Aburto fue torturado para confesar el crimen, es posible que en el amparo tramitado contra su sentencia, ante el Colegiado del Estado de México, solicite que se reponga el procedimiento y se eliminen todas las pruebas derivadas de esa tortura para resolver nuevamente el caso.
