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El dirigente de Morena en el estado Dijo que las declaraciones del obispo emérito son más como un “golpeteo” directo, no de la iglesia sino de él mismo, hacia la gobernadora
ROSARIO GARCÍA OROZCO
SNI/CHILPANCINGO, GRO.
, Jacinto González Varona, calificó como «misóginas y peligrosas» las declaraciones del obispo emérito Salvador Rangel Mendoza, «porque buscan desestabilizar al gobierno de Evelyn Salgado Pineda».
El dirigente morenista dijo que «se le olvida al obispo que no representa a la iglesia, que la política en Guerrero ya cambió y que ahora no se pacta con la delincuencia».
Lo anterior, luego de que el Obispo emérito dio declaraciones a medios de comunicación, en las que mencionó que habló con el jefe de una organización delincuencial para que permitiera que se llevara a cabo en paz la celebración de la Semana Santa en Taxco.
En respuesta a esas declaraciones, el pasado 10 de abril, la dirigencia estatal de Morena emitió un comunicado en donde pidió “respeto al pueblo”, y agrega la misiva: “Por ello es nuestra prioridad brindarle seguridad y bienestar al pueblo, que por derecho le corresponde”.
Al respecto el dirigente de Morena y diputado local, se dijo “respetuoso” de la iglesia católica y de cualquier religión, pero consideró que el obispo emérito, en sus declaraciones¨, “se ve que juega peligrosamente con este tema y lo hace ver como si fuera un aliado y cómplice (de la delincuencia), porque según en las mismas declaraciones de la iglesia católica habla de que se reúne con cierto capo del narcotráfico de la región”.
Consideró que eso «deja entrever que hay una alianza, porque al poder decirle: ‘Vente voy a platicar contigo y cálmate hoy no hagas tus fechorías’, ¿pues de qué estamos hablando? Y eso no abona para nada a la paz ni a la seguridad del estado”.
Jacinto González comentó que ese tipo de declaraciones crea “escenarios peligrosos”, hasta “perversos y tendenciosos”, que sólo benefician a “cierto grupo delictivo”, para promover su control territorial.
El dirigente de Morena en Guerrero consideró que esas declaraciones de Salvador Rangel son más como un “golpeteo” directo, no de la iglesia sino de Rangel Mendoza hacia la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, y aseguró que desde que asumió el cargo, comenzaron este tipo de declaraciones.
Recordó que en una reciente entrevista, el obispo emérito habló de que existen condiciones para un “levantamiento” del pueblo contra el gobierno, tras denunciar que hay inoperancia en el tema de seguridad, lo que calificó como una “incitación a desestabilizar al estado y la administración de la mandataria estatal».
Insistió en que no es el papel de la iglesia llamar a “levantamientos, para eso están otro tipo de organizaciones”, y más aún dijo que el pueblo de Guerrero no necesita “pastores” para que inciten al “levantamiento”, porque “nosotros hemos estado a la vanguardia de todas las revoluciones”, sin necesidad de personajes como Rangel Mendoza que «le tiene rencor a una mujer como la gobernadora Evelyn Salgado, que no le cabe en la cabeza que gobierne una mujer está entidad, va por ahí también el tema”.
