*Pesé a la orden de AMLO de abrir archivos de Sedena
JESÚS SAAVEDRA/AGN
CHILPANCINGO, GRO.
El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) aseveró que a pesar de que el presidente, Andrés Manuel López Obrador ordenó a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) abrir sus archivos y colaborar para el esclarecimiento de la desaparición forzada de 43 normalistas de Ayotzinapa, la cúpula del Ejército se niega a hacerlo y hasta oculta información importante de este caso.
Este pasado viernes en la Ciudad de México el GIEI dio a conocer su quinto informe de este caso al que llamó “una visión global” sobre esta desaparición forzada de esos 43 normalistas de Ayotzinapa.
La conferencia fue ofrecida por Ángela Buitrago y Carlos Beristain, quienes explicaron que este viernes concluía su labor en México, pero que llegaron a un acuerdo con el gobierno federal para extender su estancia en el país hasta junio próximo.
En la conferencia, los dos integrantes del GIEI afirmaron que el Ejército “obstaculiza” las investigaciones que realizan con las autoridades federales para esclarecer la desaparición de los 43 muchachos la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014 en Iguala, en la zona Norte de nuestra entidad.
Los dos integrantes del GIEI, lamentaron que a pesar que López Obrador ordenó a la Sedena colaborar con la investigación y que abriera sus archivos de la información que tiene del caso, se ha negado sistemáticamente a hacerlo.
Señalaron que se ha comprobado que el Ejército tuvo información en tiempo real de lo que estaba sucediendo en Iguala el 26 de septiembre y que la información que tienen es clave para poder esclarecer esta desaparición forzada.
Indicaron que además de la Sedena, la Marina y el Centro Nacional de Inteligencia (Cisen) han continuado “obstaculizando” las investigaciones pese que a que se ha acreditado de que miembros de estas instituciones incidieron en el caso e incluso refirieron, existen funcionarios con órdenes de aprehensión vigentes que no han sido detenidos pese a están perfectamente localizables.
Carlos Beristain señaló que se estamos viviendo “en un momento clave, todos, muchos momentos claves, pero estamos en un momento de los techos de cristal y los agujeros negros, en el trabajo, los techos de cristal porque hemos llevado avances significativos de aspectos de los que vamos a hablar y también de agujeros negros de lugares en lo que la información desaparece, que no se conoce, que se oculte y vamos a tratar de dar cuenta de esa situación”.
En el quinto informe del GIEI señala que a ocho años y medio de la desaparición forzada de esos 43 muchachos las declaraciones de militares del 27 batallón, tanto de mandos como miembros de servicios de inteligencia, han ido cambiando de versión según se han desarrollado las investigaciones; que el ejército tenía varios soldados infiltrados en la normal rural de Ayotzinapa; que el Cisen tuvo agentes de inteligencia presentes en los lugares e información de lo que sucedía en el momento de los hechos; que un grupo de jóvenes detenidos sí fue llevado a la comisaría de Barandillas en Iguala.
Indicaron además que la Secretaría de Marina realizó varios operativos que permanecieron secretos, que no se reconocieron anteriormente y que ahora con aportes documentales que ha hecho la actual administración empiezan a conocerse y que es necesario mayor apertura de los mandos del Ejército para poder llegar a la verdad y deslindar responsabilidades de este caso.