Sicarios de Los Chapitos probaban fentanilo en sus víctimas hasta matarlas: DEA
*La DEA acusó a sicarios de los hijo de El Chapo Guzmán de probar la potencia del fentanilo en personas vivas, hasta llevarlas a la muerte por sobredosis
NE RAMÍREZ
EXCÉLSIOR/CDMX
Estados Unidos informó este viernes que la recompensa por los dos hijos de El Chapo Guzmán fue duplicada de 10 a 20 millones de dólares y también detalló los delitos y las torturas que el Cártel de Sinaloa infringe para traficar fentanilo.
En conferencia de prensa, autoridades de la DEA detallaron que Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, hijos de Joaquín El Chapo Guzmán, heredaron el control del cártel de la droga tras la detención de su padre, llevando al grupo delictivo a un nivel superior de violencia.
“Los Chapitos heredaron el imperio global del narcotráfico y lo hicieron más despiadado, más violento, más mortal y lo usaron para esparcir un nuevo veneno: fentanilo”, afirmó Anne Milgram, administradora de la DEA.
En las investigaciones contra Los Chapitos, la DEA acusó a dos de los inculpados en el tráfico de fentanilo para el Cártel de Sinaloa de probar la potente droga en una mujer que había sido “sentenciada a muerte” por la organización criminal.
Los sicarios, probaron la potencia del fentanilo en la mujer hasta llevarla a la muerte por sobredosis, así, ahorraron balas y verificaron la potencia de la droga que enviarían a Estados Unidos.
Por este caso, Néstor Isidro Pérez y Jorge Humberto Figueroa, jefes de sicarios de Los Chapitos, son acusados por la DEA de probar fentanilo en personas vivas para probar la potencia de la droga, sin importar llevarlas hasta la muerte.
Además, estos mismos sicarios son acusados de alimentar dos tigres de Los Chapitos con personas vivas y muertas.
Tras el anunció del aumento de la recompensa por Los Chapitos, Randy Grossman fiscal federal del sur de California lanzó una advertencia a los hijos de El Chapo: “Vamos por su droga, vamos por su dinero y vamos por su libertad”.
Duplican
recompensa
La DEA informó que tras ser acusados de tráfico de fentanilo, armas y lavado de dinero, la recompensa por cada uno de los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán pasó de 5 a 10 millones de dólares, dando un total de 20 millones de dólares por Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar.
Los Chapitos, entre quienes figuraba Ovidio Guzmán, están en la mira de la DEA desde 2021, fecha en que agencia antidrogas de Estados Unidos ofreció 5 millones de dólares por cada uno al ser identificados como miembros de alto rango dentro del cártel de Sinaloa.