REDACCIÓN/QUADRATÍN
ACAPULCO, GRO.
Obispos del país repudiaron el atentado que sufrió el arzobispo de Durango, Faustino Armendáriz Jiménez, en la Catedral de la capital duranguense, el pasado el domingo, luego de que un anciano sacó un cuchillo al acabar la misa y trató de lesionarlo.
En un comunicado, expresaron su “solidaridad y repudio al atentando” y señalaron que en momentos como estos “es crucial que nos unamos como sociedad y reafirmemos nuestro compromiso con los valores fundamentales de la paz, la tolerancia y el respeto mutuo”.
En el documento firmado por el presidente y el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) Rogelio Cabrera y Ramón Castro, los obispos rechazaron cualquier tipo de violencia y fanatismo.
Llamaron al diálogo y la reconciliación como medios para resolver las diferencias, agradecieron a la Virgen de Guadalupe por la protección del arzobispo y pidieron a Dios que “nos conceda la paz que tanto anhelamos y rogamos por la conversión de quienes causan tanto dolor a la sociedad”.