Creció la extorsión y la inseguridad en Acapulco por fallida estrategia: Solorio

MARCIAL CAMPUZANO
CHILPANCINGO, GRO.

Derivado de la fallida estrategia de seguridad aplicada por las autoridades municipales, en Acapulco la delincuencia y los actos de extorsión crecieron exponencialmente, a lo que se suman las ejecuciones a cualquier hora del día casi en presencia de los agentes federales que según llegan al puerto para reforzar la seguridad, dijo el exdiputado local Ramiro Solorio Almazán.

El también exregidor en el municipio de Acapulco por el Partido Movimiento Ciudadano, sostuvo que es un secreto a voces que la inmensa mayoría de los comerciantes son víctimas de extorsión que no frena la autoridad municipal. Sostuvo que las principales víctimas de ese delito son los vendedores del Mercado Central que el pasado fin de semana se incendió afectando a más de 570 locatarios.

“Todo mundo sabe que todos son extorsionados, ahí en Acapulco todo mundo paga el cobro de piso, ha crecido la extorsión en Acapulco a niveles escandalosos, dijo Solorio Almazán en una entrevista que concedió a un conductor de noticias de la capital del estado.

Incluso, sostuvo que muchos actos de extorsión son cometidos “frente a las narices” de las autoridades, “lo mismo que los asesinatos que se cometen también frente a los integrantes de las fuerzas federales” que llegan a Acapulco según para reforzar la estrategia de seguridad.

Ramiro Solorio recalcó que Acapulco es la segunda ciudad más violenta a nivel mundial, lo cual es extremadamente grave. Dijo que ello se debe al incremento de los homicidios dolosos y al delito de extorsión, principalmente, lo cual es verdaderamente grave.

El exdiputado local señaló que en contraste con lo que pasa, el gobierno municipal de Acapulco está enfrascado en las pachangas, en la organización de eventos artísticos-musicales con el pretexto de aumentar la afluencia de turistas.

Consideró que ese tipo de eventos financiados por la autoridad municipal, funcionan también como distractores para que la gente se olvide de los graves problemas de inseguridad y de violencia que hay en ese destino de playa.

A los problemas de inseguridad y de violencia, se suma el desabasto de agua potable en que se encuentra más de la mitad de los habitantes de Acapulco, que como nunca sufren de la carencia del vital líquido en sus hogares. “Este es también un problema gravísimo”, dijo el exregidor.