*PRI, PRD y PAN frenan la imposición de Joaquín Badillo
*“No hay veto para nadie, sólo queremos que se respete la ley”, aclaran
*La estrategia del dirigente de Morena, Jacinto González no fue consensada con su grupo parlamentario
ROGELIO AGUSTÍN/SNI
CHILPANCINGO, GRO.
La estrategia que el dirigente estatal de Morena, Jacinto González Varona puso en marcha para asumir el control de la Mesa Directiva del Congreso local, a través de la representación del PVEM y con el diputado Joaquín Badillo Escamilla como instrumento se entrampó, al encontrar resistencia en los grupos parlamentarios del PRI, PRD y PAN.
Aunque la sesión de este martes convocada para las 11:00 horas, el pase de lista inicial comenzó casi hasta las 18:30, teniendo la asistencia de 45 de 46 diputados.
Incluso los tres diputados de Tierra Caliente; Elzy Camacho Peñaloza, Susana Paola Juárez Gómez y Adolfo Torales Catalán estuvieron presentes en los trabajos de manera virtual, ya que desde hace dos meses no viajan a Chilpancingo porque enfrentan amenazas de parte de un grupo del crimen organizado.
Este martes 13, en la orden del día se nombró a los 12 diputados que van a formar parte de la Comisión Permanente que se quedarán al frente de los trabajos del Congreso durante el periodo de receso, que inicia el próximo viernes 16 de junio.
El paso inmediato era nombrar a la Mesa Directiva, cuya presidencia busca el ahora ex integrante del Grupo Parlamentario de Morena, Joaquín Badillo Escamilla, quien el jueves 8 de junio se separó de la bancada guinda y se sumó a la representación del verde, que apenas es de dos diputados, pero que supera las representaciones únicas del PAN y del PT.
De acuerdo con el dirigente estatal de Morena, Jacinto González Varona, la intención de llevar a Badillo Escamilla a la presidencia de la Mesa Directiva, era garantizar más condiciones de gobernabilidad en el estado.
Sin embargo, reconoció que la estrategia se puso en marcha sin comentarlo con su coordinadora de fracción, Yoloczin Domínguez Serna.
La mañana del martes, la coordinadora parlamentaria de Morena y presidenta de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), confirmó que no solo no había sido notificada del movimiento, aclaró que estaba más interesada en mantener un clima de armonía y gobernabilidad en el Congreso.
Lo anterior, porque el coordinador del PRI, Héctor Apreza Patrón había declarado que la imposición de Badillo Escamilla rompería los acuerdos que permiten que haya gobernabilidad, porque la Ley Orgánica del Congreso no permite que un solo partido ocupe la presidencia de Jucopo y la presidencia de la Mesa Directiva.
El dirigente estatal del PRD, Alberto Catalán Bastida anticipó que dicha estrategia no pasaría, porque implica un avasallamiento.
Los cabildeos
no prosperaron
Durante la jornada del martes, los integrantes del Grupo Parlamentaria de Morena se reunieron en la sala José Francisco Ruiz Massieu, tratando de cuadrar una propuesta que generara consenso.
El diputado y dirigente estatal de Morena, Jacinto González, en charlas con los medios confiaba en que el asunto terminaría por resolver a favor de la propuesta de Joaquín Badillo.
Sin embargo, la oposición de los grupos del PRI, PRD y la representación del PAN se mantuvo.
Extraoficialmente, se manejó que tanto el tricolor como el del sol azteca cederían un diputado por grupo parlamentario, para que el PAN incrementara su presencia a tres diputados y superara los 2 que mantienen al PVEM como la cuarta fuerza política.
Sin embargo, al instalarse la penúltima sesión del periodo ordinario, en la Orden del Día se incorporó el punto que establece la elección de los 12 diputados que integran la Comisión Permanente, pero no se votó por quienes integrarán a la Mesa Directiva.
“No hubo acuerdos, porque PRI, PRD y PAN somos partidarios de que se respete la ley, por eso le estamos haciendo un llamado al grupo mayoritario (Morena) a que nos sujetemos a eso; la legalidad y la proporcionalidad”, anotó.
Reiteró: “La ley es muy clara; el grupo parlamentario que presida la Jucopo no podrá presidir al mismo tiempo la Mesa Directiva”.
El asunto debe desahogarse a más tardar el 15 de junio, cuando cierra el periodo ordinario y el Congreso entra en la etapa de receso.
