Van con todo UPOEG por violación a derechos de indígenas y afromexicanos

*Realizarán asambleas comunitarias y acciones de protesta contra consulta avalada por la Suprema Corte

MARCIAL CAMPUZANO
CHILPANCINGO, GRO.

Comunidades indígenas y afromexicanas, anunciaron la celebración de asambleas comunitarias y la realización de manifestaciones para defender sus derechos, que habrían sido afectados por la supuesta consulta que realizó el Congreso del estado, y que validaron “desde la comodidad de sus escritorios” los ministros de la Suprema Corte de Justicia, a quienes acusan de haber violado convenios internacionales y la Constitución política federal.

Arropados por la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) que dirige Bruno Plácido Valerio, comisarios y comisariados señalaron además que seguirán operando las policías comunitarias en los territorios indígenas, así como las casas de justicia para la reeducación de los infractores de la ley, bajo el argumento de que en el sistema penitenciario se cometen muchos errores y predomina la influencia del dinero.

El dirigente de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, sostuvo que el Congreso del estado y la Suprema Corte de Justicia, violaron los derechos de los pueblos originarios al validar la supuesta consulta que hicieron los diputados.

Ante ello anunció la celebración de asambleas y acciones de protesta, “por la violación a nuestros derechos como pueblos indígenas y afromexicanos, “porque no podemos permitir que el Estado violente nuestros derechos, cuando hoy pregonan que es el pueblo el que manda”, y por la discriminación y racismo con que se condujo el Congreso con la supuesta consulta, a pesar de que Guerrero es un estado que tiene más de 700,000 indígenas y afromexicanos que no permitirán que sean violados sus derechos”.

Con las acciones de protesta, las comunidades indígenas y afromexicanas buscarán que no sean violados sus derechos. “Tenemos más de 500 años de lucha y vamos a seguir haciéndolo”.

Advirtieron que no permitirán que sean sometidos por el gobierno, porque los pueblos indígenas tienen sus propias formas de organizarse, tiene sus propios usos y costumbres que no deben estar en disputa.

Aclaró al Congreso del estado y a la Suprema Corte que hay leyes que defienden a los indígenas y afromexicanos, “por lo que nos vamos a defender con las uñas y los dientes de ser necesario”.

Recordó que el gobierno acusó a las policías comunitarias de la UPOEG de estar infiltrados por miembros de grupos delictivos, y que a pesar de haberse retirado del corredor Acapulco-Cuajinicuilapa “para demostrarles que no somos nosotros, en ese tramo siguen ocurriendo muchas extorsiones y siguen los problemas”.

Bruno Plácido sostuvo que tanto el Congreso como la Suprema Corte violó el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y el artículo segundo de la Constitución federal, que remarca que los pueblos indígenas tienen derecho a crear sus propias instituciones, “y cuando lo hacen son perseguidos y divididos”.

El convenio 169 establece que para que los pueblos indígenas sean consultados, deben ser informados de buena fe y eso nunca ocurrió; además, validaron consultas con la firma de documentos por parte de personas afines a los diputados, sin celebrarse asambleas plenarias con la participación por lo menos el 50 por ciento más uno de sus habitantes para que tengan validez.

Las asambleas comunitarias y las protestas terminarán el 9 de agosto, fecha en que se celebra el Día Internacional de los Pueblos Indígenas. Habrá acciones “para ratificar nuestro camino como pueblos indígenas y afromexicanos”, dijo Bruno Plácido.

Exigirán al Congreso del estado que no siga discriminando a los indígenas y a los afromexicanos, que no incurra en racismo, y que ya no sigan utilizando a esos sectores de la población para grandes festejos en el Día de los Indígenas para después dejarlos empobrecidos, divididos y confrontados.

Sostuvo que en muchos pueblos de La Montaña y la Costa Chica, personal del Congreso obligó a los indígenas a firmar documentos con la advertencia de que no habría obra pública si no los validaban.