REDACCIÓN/QUADRATÍN
CIUDAD DE MÉXICO
La organización Alto al Secuestro informó que durante el mes de junio 2023, se incrementaron 7.5 por ciento las carpetas de investigación iniciadas por el delito de secuestro.
Se tiene el registro de 86 carpetas, en comparación con las 80 del pasado mes de mayo 2023.
Durante este mes, se registraron 3 secuestros masivos; es decir, en un mismo evento fueron secuestradas varias personas pero se registran en una sola carpeta de investigación.
En los 3 eventos señalados, hubo 78 víctimas, de las cuales 36 en Cuerámaro, Guanajuato; 26 en Sonoytia, Sonora y 16 en Ocozocoautla, Chiapas.
Los estados con mayor incidencia en junio fueron Estado de México con 9 secuestros; Puebla, Quintana Roo y Veracruz con 6 casos, y Morelos con 5 secuestros.
En cuanto a la tasa por cada 100 mil habitantes en mayo 2023, se señala a Quintana Roo, Morelos, Zacatecas, Colima y Sonora. Los estados que reportaron cero secuestros son Aguascalientes, Campeche, Durango, Nayarit, Querétaro y Tlaxcala.
De acuerdo con la organización, resalta que este mes Yucatán tuvo 1 evento de secuestro, ya que se mantenía libre de este delito desde noviembre 2021.
A nivel general, disminuyó en 28.3 por ciento el número de víctimas de secuestro.
Durante el mes de junio 2023 hubo 212 víctimas mientras que en mayo 2023 hubo 296 víctimas de este delito.
Incrementó en un 61.5 por ciento el número de detenidos relacionados al delito de secuestro, debido a que en junio 2023 fueron detenidas 63 personas mientras que en mayo 2023 fueron detenidos 39 presuntos responsables.
Magnitud
del secuestro
La organización Alto al Secuestro señaló que a diario los medios de comunicación dan cuenta de la violencia que vive el país, lo cual, no se ve reflejado en las cifras oficiales.
“En el caso de uno de los delitos que más laceran a la sociedad, como es el secuestro, no conocemos su verdadera magnitud en la estadística oficial”, cita el comunicado.
En Alto al Secuestro, buscan conocer la realidad de este delito, por lo que las cifras mostradas se componen tanto de las cifras oficiales que les proporcionan los Estados como de los registros de eventos de secuestro que cada mes localizan en medios de comunicación.
Por ello, estas cifras no coinciden con las reportadas en el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, ya que ahí sólo encuentran una pequeña parte de lo que en realidad ocurre en el país.
Otro motivo por el cual existe discrepancia en las cifras, es porque los Estados registran los secuestros como otros tipos penales, como homicidio, robo o privación ilegal de la libertad. Lo cual, ocasiona que se desconozca cuándo, dónde y quién comete el delito de secuestro; datos que son fundamentales para crear políticas públicas que permitan a los tres órdenes de gobierno medir y focalizar esfuerzos para erradicar este delito.
“Es lamentable que en los Estados se hayan prácticamente desmantelado las Unidades Antisecuestro, que fueron resultado de un gran esfuerzo de la sociedad civil y de buenas prácticas en los Estados”, cuestiona Alto al Secuestro.
Esto ha ocasionado que no haya estrategia en contra del secuestro, que las víctimas sean invisibilizadas, no tengan una atención digna y sus derechos no se lleven a la realidad y en consecuencia, la impunidad sigue creciendo.