*Representa a la región Nahuatl; es abogada originaria de José Joaquín de Herrera y obtuvo en la asamblea 36 votos
*A la asamblea asistieron representantes de 37 municipios que tienen más del 40% de población indígena
*La zona Mixteca, los Me Phaa, los Amuzgos y los Náhuatl presentaron a sus candidatos
ÁNGEL GALEANA/RÉPLICA
CHILPANCINGO, GRO.
En una alargada y discutida asamblea realizada en Tlapa, representantes de los pueblos originarios: Náhuatl, Amuzgo, Me Phaa y Mixteco, eligieron a Rossibel Bello Mateo como su representante ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), quien participará en el proceso electoral 2023-2024. También eligieron a Claudia Morán como su suplente.
Del perfil de Rossibel Bello no hay mayor información en los motores de búsqueda con su nombre en redes sociales o internet. Entre los datos encontrados es que entre el 1 de julio y el 30 de septiembre del 2022 fue beneficiaria del programa de promotorías culturales del INPI, recibiendo 12 mil pesos.
En su intervención al presentarse ante la asamblea dijo ser abogada sin referir ningún dato adicional sobre sus actividades. En el Registro Nacional de Profesionistas aparece como licenciada en derecho por la UAGro.
Las 4 etnias participaron en una asamblea estatal organizada por el IEPC en el municipio de Tlapa, para definir, por ordenamiento del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, a petición de pobladores de Tecoanapa y Ayutla, a quienes serían los representantes de pueblos originarios ante el órgano electoral, situación única en el país.
A la asamblea asistieron representantes de 37 municipios que tienen más del 40% de población indígena: Acatepec, Ahuacuotzingo, Atenango, Atlamajalcingo, Alcozauca, Atlixtac, Ayutla, Alpoyeca, Cohoapa, Copalillo, Copanatoyac, Cualac, Cuetzala, Eduardo Neri, Huamuxtitlán, Huitzuco, Iguala, Iliatenco, José Joaquín de Herrera, Malinaltepec, Metlatónoc, Mochitlán, Olinalá, Ometepec, Quechultenango, San Luis Acatlán, Tepecoacuilco, Tixtla, Tlacoachistlahuaca, Tlacoapa, Tlalixtaquilla, Tlapa, Xalpatláhuac, Xochihuehuetlán, Xochistlahuaca, Zapotitlán y el reciente creado Ñuu Savi.
Quienes no se presentaron fueron representantes de Buenavista de Cuéllar, Chilapa y Mártir de Cuilapan.
Para elección, los representantes de cada etnia eligieron a dos candidatos para que fueran votados por la asamblea. La zona Mixteca presentó a Delfina Álvarez Moreno y a Bernabé García Vázquez; los Me Phaa eligieron a Claudia Morán y a Juan Bruno Guzmán; los Amuzgos a Doralis Morales y Caín de Jesús Apostol, y los Náhuatl a Rossibel Bello Mateo y a Arturo Moisén.
La votación para la representación del IEPC tuvo amplia mayoría Rossibel Bello, originaria de José Joaquín de Herrera y representante del pueblo Náhuatl con 36 votos; el segundo lugar lo obtuvo Juan Bruno Guzmán con 27 votos; el tercer lugar fue para Arturo Moisén con 18; el cuarto lugar Claudia Morán con 15 votos; el quinto fue para Bernabé García con 14; el sexto para Delfina Álvarez con 13 y el séptimo para Caín de Jesús con 11, y el octavo para Doralis Morales con 9.
La discusión
Durante el desarrollo de la asamblea se presentaron distintos pronunciamientos de representes respecto a la presunta intromisión política en las asambleas, a los lineamientos establecidos por el IEPC, y hasta la desunión entre los pueblos indígenas en la construcción de acuerdos.
Sin embargo, fue cuando tenían que elegir al suplente cuando hubo mayores inconformidades , y es que, en la mayoría de los representantes exigía que el suplente de Rossibel Bello fuera Juan Bruno, por haber quedado en segundo lugar de la votación general, lo cual no era posible por los lineamientos definidos por el IEPC.
Y es que, para cuidar el principio de paridad, las fórmulas que podían conformar eran: hombre-hombre, mujer-mujer, y hombre-mujer, pero no podría establecerse mujer-hombre.
Entre los inconformes, un representante que se caracterizó por levantar la voz en dos intervenciones que hizo, exigió que no se dejara fuera de la fórmula a Juan Bruno, que es originario de Ayutla, porque fue uno de los pueblos que inició los juicios para que las comunidades afros y originarias tuvieran una representación ante el IEPC; incluso, acusó que el órgano electoral había puesto «camisa de fuerza» al procedimiento, porque entre otras cosas, no aceptó que se nombrarán a dos representantes por étnia.
Una de las representantes que también levantó la voz al borde del grito, exigió que se mantuviera a Juan Bruno argumentando que en las asambleas de pueblos se respeta lo que se acuerda entre los presentes.
Finalmente, entre dimes y diretes, el director de Sistemas Normativos Pluriculturales del IPEC, Zenaido Ortiz Añorve, explicó que el Instituto no puede reconocer una fórmula integrada por titular mujer y suplente hombre por cuidar el principio constitucional de la pardiad.
Señaló que el artículo 2 Constitucional protege los derechos y la libre determinación y autonomía de los pueblos, siempre y cuando no contravengan principios constitucionales.
«Esto está contraviniendo un principio que es el principio de pardiad. No es una camisa de fuerza del IEPC, es preservar el derecho de las mujeres, y más aún, el derecho de las mujeres indígenas», explicó.
Advirtió a los inconformes que si la asamblea determinaba mantener en la suplencia a Juan Bruno, o género hombre, cualquier tribunal lo echaría abajo, incluso el Consejo General del IEPC no lo aprobaría a la hora de calificar la asamblea, toda vez que lo que tratan de proteger es que no haya casos de «jaunitas», en los que un hombre suplente quita a una mujer propietaria para el ejercicio de un cargo.
Luego de varias horas de asamblea y tras la explicación jurídica, los representantes acordaron que en la fórmula fueran dos mujeres, Rossibel Bello que ganó por mayoría y Claudia Morán que fue la segunda mujer con más votos.