Grupos del crimen ignoran petición de obispo para buscar la paz

*Sin embargo, sí envían a personas para escuchar sus misas

*“Fuerzas ajenas, de fuera del estado nos hacen pelear y nos meten armas”, reprocha el obispo José de Jesús González Hernández

JESÚS DORANTES/SNI
CHILPANCINGO, GRO.

El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, aseguró que desde su llegada, en abril de 2022, ha realizado llamados en sus misas a los grupos del organizado para que dejen las armas y busquen reinstalar la paz, pero hasta la fecha, su voz no ha sida escuchada.

El jerarca de la Iglesia Católica acudió la jornada del miércoles 4 de octubre a la iglesia del Barrio de San Francisco, en Chilpancingo, dónde oficio la misa que formaba parte de las actividades programadas por los habitantes, en el marco de sus fiestas patronales.

Al término de la ceremonia religiosa, el obispo González Hernández fue cuestionado respecto al si mantiene la ruta marcada por su antecesor, Salvador Rangel Mendoza, quien ha hecho algún llamado a los grupos del crimen organizado para pacificar la entidad.

González Hernández dijo que siempre ha realizado ese tipo de llamados en cada misa que celebra, pero hasta el momento no le han hecho caso.

“Yo estoy rezando mucho y diciéndoles que ya paremos con las armas y que hay otros recursos, que los usemos para invertir en el campo, que impulsemos granjas y producción para que no se exista el hambre”, destacó el prelado.

Pese a la ausencia de respuestas, aseguró que sí es escuchado por los grupos, ya que mandan a “escuchas” para monitorear lo que dice; “desde que llegué predico este mensaje en todas mis misas, en unas o en otras ellos están presentes, mandan gente para escucharnos y entonces ellos ven por dónde va (el llamado), pero parece que no nos hacen caso”.

Cuestionado respecto a la razón por la que sí se atendían los llamados del obispo emérito, Salvador Rangel cuando encabezó la Diócesis, refirió que desconocía el motivo, pues había buscado llegar a los grupos que tienen control en la entidad para coadyuvar en la pacificación.

“Estoy conociendo Guerrero y a los guerrerenses, estoy conociendo las fuerzas que mueven Guerrero, pero todavía no las encuentro, porque voy a un lado y otro pero son débiles, todavía no las encontrado”, anotó.

Agregó que las armas y órdenes que han generado la ola de violencia de los últimos meses vienen de arriba, pero aclaró que no del cielo: “seguramente son de fuera, mientras aquí nos peleamos o nos hacen pelear, pero son fuerzas ajenas, son de fuera, nos hacen pelear y nos meten armas para que nos matemos”.