LOURDES LÓPEZ
EXCÉLSIOR/CDMX
Autoridades veracruzanas informaron que hubo seis detenciones relacionadas con las ejecuciones de los cuatro adultos y un niño de tres años que fueron encontrados a finales de octubre en una fosa clandestina en la congregación El Castillo del municipio de Xalapa.
Además, las autoridades confirmaron que el asesinato derivó de un tema de drogas.
Los grupos de la policía ministerial catearon tres viviendas en la periferia de la capital de Veracruz para detener a quienes presuntamente estarían involucrados en la desaparición, muerte e inhumación clandestina de las cinco víctimas, desaparecidas desde el 16 de agosto de este año y exhumados entre el 7 y el 9 de noviembre.
Durante las investigaciones, las autoridades conocieron que los cinco estaban en un punto de venta y presuntamente ya tenían adeudos que no habían cubierto por el consumo de los estupefacientes, lo que derivó en una cruel venganza.
De acuerdo con lo informado por las autoridades investigadoras, los detenidos enfrentarán los delitos de desaparición por particulares.
Mientras tanto, en Xalapa se efectuó el sepelio de Marilú Galicia, de 21 años y de su pequeño hijo Jadiel García, de 3 años, en medio de un dispositivo de la Secretaría de Seguridad Pública que no permitió el acceso a los medios de comunicación y cerraron el panteón municipal Bosques.
De manera simultánea, pero por separado, también se efectuaron los funerales de Jorge Tapia, Emmanuel Rodríguez y Beatriz García.
Los gastos corrieron a cargo del estado, pues la condición de los deudos es de pobreza.
En el caso de Jorge Tapia, su familia acudió a una misa de cuerpo presente en la Catedral Metropolitana de Xalapa, en donde un grupo de jubilados realizaban una manifestación y bloqueaban la calle Enríquez, para reclamar el pago de seguros.
