*Los estudiantes bloquearon parcialmente la Autopista del Sol, donde retuvieron vehículos oficiales
*En las unidades viajaban servidores de la nación, quienes regresaban del Puerto de Acapulco, entre ellas unidades del Sistema Nacional de Protección Civil
* Dejaron las unidades parcialmente desvalijadas
JESÚS DORANTES / SNI
CHILPANCINGO, GRO.
Durante cuatro horas, estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa cerraron de manera intermitente la Autopista del Sol para exigir la entrega de material didáctico.
Durante la protesta retuvieron nueve camionetas del Gobierno de la República, las que al retirarse dejaron semi desvalijadas.
El mediodía de este domingo, un grupo de estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos llegaron hasta el punto conocido como el Parador de Marqués, luego de atravesar los autobuses que tienen en su poder, permitieron el tránsito en un solo carril de cada sentido.
Los jóvenes tenían el rostro cubierto y retuvieron una caravana integrada por 10 camionetas en las que viajaban servidores de la nación, quienes regresaban del Puerto de Acapulco, entre ellas unidades del Sistema Nacional de Protección Civil.
Representantes de la Dirección de Gobernación estatal acudieron al bloqueo para dialogar con los estudiantes, a quienes solicitaron la liberación de las camionetas que se utilizan para realizar brigadas de entrega de víveres que son enviados al puerto de Acapulco.
En respuesta, los estudiantes sólo refirieron que las unidades “ahí estaban detenidas” sin dar cuenta que realizarían con ellas ni del momento en que pensaban liberarlas.
Los normalistas dijeron que todos los vehículos con víveres tenían prioridad para pasar.
La aglomeración de vehículos en la entrada sur de Chilpancingo es tensa, dada la cantidad de autos varados.
Al lugar llegaron elementos de la Policía del Estado habilitados con equipo antimotines, los que se apostaron en los carriles sur-norte, con la consigna de impedir que se retiraran llevándose las unidades de gobierno en su poder.
Alrededor de las 04:30 de la tarde, tras dialogar con funcionarios de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), los normalistas rurales decidieron retirarse de la capital del estado.
Cuando el personal de Seguridad Pública y de Gobernación Estatal revisaron las camionetas, encontraron que una de ellas tenía el medallón estrellado y las demás con el interior de las cabinas destrozadas.
Les quebraron espejos, sustrajeron esteros y les “ordeñaron” el combustible que tenían en sus respectivos tanques.
No hubo enfrentamientos con las autoridades, tampoco detenidos.