*Las casi 100 familias de que habitan en los tres poblados, han tenido que huir
EDUARDO YENER SANTOS
QUADRATÍN GUERRERO
Las comunidades de Buenavista de los Hurtado, El Nanche y El Terrero, del municipio Heliodoro Castillo (Tlacotepec), se encuentran prácticamente deshabitadas, tras los recientes ataques armados, por presuntos criminales de la Familia Michoacana, que ha dejado 10 personas calcinadas, seis heridas y 14 desaparecidas.
Las casi 100 familias de que habitan en los tres poblados, han tenido que huir y refugiarse en Tetela del Río o en la cabecera municipal, ante los constantes ataques a través de drones e incursiones armadas.
Dichos poblados vecinos, se localizan al norponiente de Heliodoro Castillo, en la Sierra de Guerrero, en los límites colindantes con los municipios de Apaxtla de Castrejón en la región Norte y San Miguel Totolapan en la Tierra Caliente.
Las familias de Buenavista de los Hurtado que se refugian en Tetela del Río, un pueblo cercano a la presa El Caracol, a orillas del río Balsas, recuerdan que desde el año 2018 personas armadas que se identifican como la Familia Michoacana, comenzaron a incursionar en dicho lugar.
Los habitantes que por temor omiten sus nombres, afirman que al principio los armados solo les pedían comida, agua o parte de sus cosechas de maíz, frijol, calabaza o jamaica, pero a finales de 2021, las agresiones llegaron por aire a través de drones, de los que caen bombas hechizas y estas caen sobre los techos de lámina de las viviendas o en los techos de las escuelas, clínicas o las canchas de los pueblos.
El éxodo de las familias comenzó a finales de 2021; se refugiaron en Tetela del Rio un pueblo que tenía más de 400 habitantes, pero con la llegada de las nuevas familias de Buenavista de los Hurtado, El Nanche y el Terrero la población aumentó a más de 500.
Las familias de Buenavista de los Hurtado aún se rehúsan en dejar su comunidad, refugiados en Tétela del Rio, ya que aun acudían a sus tierras de cultivo ubicadas cerca de Buenavista; en 2023 sembraron maíz, frijol y calabaza para tener cosecha de autoconsumo.
A finales del mes de diciembre comenzaron a hacer trabajos de cosecha de maíz y, el jueves 4 de enero 30 personas acudieron a Buenavista de los Hurtado para recoger las cosechas y, fue ahí cuando irrumpió un grupo armado y los atacó.
De las 30 personas que permanecían en Buenavista de los Hurtado; 16 hacían trabajos de vigilancia y 14 se encontraban pizcando las mazorcas de maíz. Tras el ataque que se registró alrededor de las 10 horas, 10 fueron asesinadas y después incineradas, seis quedaron heridas y 14 se desconoce su paradero.
Los pobladores comentan que las 14 personas desaparecidas podrían haberse refugiado en las comunidades de Ixtayotla o Amacahuite, pero por la lejanía y la falta del servicio de teléfono e internet no se han podido comunicar con habitantes de esas comunidades.
Los habitantes de esos pueblos de Heliodoro Castillo reconocen que en esta zona se vive una disputa del territorio entre los grupos delictivos identificados como La Familia Michoacana y Los Tlacos, pero aseguran que los que han pagado las consecuencias son familias que no tienen nexos con ninguno de esos grupos.
Se quejan de la falta de atención de parte de las autoridades, y lamentan que los criminalicen y las mismas autoridades las vinculen con el grupo de Los Tlacos. Las familias de estos pueblos han depositado su fe y confianza en el sacerdote, Filiberto Velázquez, coordinador del Centro de Derechos de las Víctimas de la Violencia Minerva Bello, quien ha acompañado a estos pueblos en busca de justicia y seguridad.
Desde marzo de 2023 cuando el padre comenzó acompañar a estos pobladores la demanda siempre ha sido la misma, presencia de seguridad pública de parte del Estado para que los pueblos retomen su vida y regresen los médicos y maestros en estas comunidades.
