Beltrones empaca para el Senado con una maleta de señalamientos y descalabros
ALFONSO LÓPEZ DÁVILA
SINEMBRAGO/CDMX
Manlio Fabio Beltrones está de regreso. El prominente miembro del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que carga a cuestas señalamientos y derrotas en su paso como dirigente de ese partido, buscará un escaño en el Senado a través de la alianza opositora en los comicios del 2 de junio de 2024.
Tras renunciar a la presidencia del Revolucionario Institucional en 2016 derivado del descalabro electoral de ese año, el también exgobernador de Sonora se alejó de la vida pública. Ahora, buscará un escaño en la Cámara Alta, espacio donde ya estuvo anteriormente en dos etapas, de 1988 a 1991 y de 2006 a 2012, en este periodo en el Senado, fue presidente de la Mesa Directiva.
El retorno de Manlio Fabio se da luego de que el PRI, partido al que pertenece desde los inicios de su carrera política en Sonora a finales de los años 60, iniciara el registro de los aspirantes que buscan las candidaturas al Senado de la República y a la Cámara de Diputados correspondientes a los distritos y estados asignados al partido tricolor por Fuerza y Corazón por México junto a Acción Nacional (PAN) y al Partido de la Revolución Democrática (PRD).
El sonorense, que ya había expresado su intención de volver a la política en diversas entrevistas, completó su registro como aspirante a ocupar un escaño en el Senado el pasado 17 de enero y detalló que será por la vía de mayoría relativa, la cual se define con el voto directo de la población, sin embargo, no descartó registrarse también por la vía plurinominal.
De acuerdo con el Instituto Nacional Electoral (INE) en los comicios de 2024 se elegirán a 128 senadores, de los cuales 64 serán electos por mayoría relativa; 32 por representación proporcional y 32 más por primera minoría.
Las precampañas para la senaduría iniciaron el pasado 20 de noviembre del 2023 y concluirán el 18 de enero de 2024. En tanto, las campañas arrancarán oficialmente el primero de marzo y deberán concluir el 29 de mayo, tres días antes de las votaciones programadas para el 2 de junio de 2024.
Un largo
historial
Manlio Fabio Beltrones Rivera nació en Villa Juárez, Sonora, el 30 de agosto de 1952 y estudió Economía en la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Ingresó al Partido Revolucionario Institucional en 1968 y su primer cargo público fue como jefe del Departamento de Delegaciones Distritales en el Distrito Federal.
En 1982 se desempeñó como Diputado Federal por el IV Distrito de Sonora en la LII Legislatura. En 1985 fue designado como Presidente del PRI en Sonora, y luego, Secretario de Gobierno del estado.
En 1988 fue Senador por su estado y posteriormente fue designado Subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación. En 1991 fue postulado como candidato del PRI a Gobernador de Sonora puesto que ganó y que desempeñó de 1991 a 1997.
La carrera de Beltrones dentro del PRI lo llevó a ser elegido presidente del partido en octubre de 2015 con la finalidad de preparar el camino para el proceso electoral de 2018. Sin embargo, presentó su renuncia el 20 de junio de 2016, tan solo 10 meses después de haber asumido el cargo, tras la derrota en los comicios de ese año.
El partido tricolor perdió siete de las 12 gubernaturas que estaban en juego, cuatro de ellas que no habían conocido otro gobierno que no fuera de este partido: Durango, Quintana Roo, Veracruz y Tamaulipas. Las otras tres entidades fueron Aguascalientes, Chihuahua y Puebla.
Manlio Fabio Beltrones es un personaje clave y polémico de la política mexicana. A lo largo de su trayectoria, sobre todo en las últimas dos décadas, ha recibido sido señalamientos que lo involucran a él, y a sus cercanos, en tramas de corrupción gestadas desde el poder.
En 2021, el político sonorense enfrentó señalamientos que lo involucraban tanto a él como a sus cercanos en un escándalo de dinero relacionado con depósitos millonarios a la Banca Privada d’Andorra (BPA).
Según una investigación de El País, su hija, la Senadora Sylvana Beltrones Sánchez, tuvo en la BPA, una cuenta millonaria en donde ingresó 10.4 millones de dólares entre 2009 y 2010. La situación provocó todo tipo de cuestionamientos debido a que en ese entonces la hija del político priista tenía 26 años y no se desempeñaba en ningún cargo público, mientras que su padre era coordinador de los senadores del tricolor.
Supuestos
nexos
Aunado a los escándalos por corrupción y desvió de recursos públicos, están los supuestos nexos del priista con grupos del crimen organizado. El primer episodio de sospechas sobre Beltrones data de 1997, en la recta final de su mandato como Gobernador de Sonora. El 23 de febrero de ese año, The New York Times publicó una investigación de los reporteros Sam Dillon y Craig Pyes en la que se señalaba a Beltrones de colaborar con uno de los narcotraficantes más poderosos del mundo en esos momentos: Amado Carrillo Fuentes, “El señor de los cielos”.
La investigación del diario estadounidense, realizada durante cuatro meses, se basó en documentos de inteligencia y entrevistas con funcionarios de ese país, quienes referían informes “altamente confiables” sobre la supuesta partición de Manlio Fabio en reuniones en las que los principales traficantes pagaban a políticos de alto nivel que protegían sus operaciones.
Beltrones dijo en ese entonces que los informes de inteligencia estadounidenses habían sido fabricados por sus rivales políticos. “Esto suena como una novela, llena de horror y error”, respondió al Times hace más de dos décadas. “¿A qué hora del día gobierno, si paso mi tiempo en todos estos crímenes?”.
Como Gobernador, Beltrones fue además un personaje clave en uno de los magnicidios que marcaron la historia moderna de México: el de Luis Donaldo Colosio, candidato presidencial del PRI. Tras el asesinato ocurrido en Lomas Taurinas, en Tijuana, Baja California.
Beltrones recibió una llamada del Presidente Carlos Salinas de Gortari, quien le pidió que fuera al lugar de los hechos y desde entonces se convirtió en el enlace directo con el Jefe del Ejecutivo en este caso. El entonces mandatario sonorense fue de los primeros que habló con Mario Aburto, señalado como actor material del crimen, después de su detención.
Durante el Gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, Manlio Fabio Belrtones fue uno de los principales impulsores del llamado Pacto por México, bajo el cual el PRI y los dos principales partidos de oposición, PAN y PRD, tejieron una alianza que sacó adelante una serie de reformas estructurales.
Otro de los escándalos que rodea a Beltrones es la llamada “Operación Safiro”, una red de desvíos realizados desde las arcas del Gobierno de Chihuahua por 250 millones de pesos para financiar la campaña política priista en 2016, cuando él era presidente del partido y el Gobernador de la entidad era César Duarte Jáquez.
El desvío en cuestión se dio desde la Secretaría de Educación, Cultura y Deporte de Chihuahua dirigida por Ricardo Yáñez Herrera (preso en 2017 y liberado en 2019) a las empresas fantasmas Samex, Despacho de Profesionistas Futura, Sinnax y SISSAS para talleres y un software no brindados, de acuerdo con la investigación del Gobierno estatal.
La “Operación Safiro” abarca desvíos a campañas priistas en al menos siete estados: Chihuahua, Durango, Sonora, Colima, Estado de México, Morelos y la Ciudad de México.
