Nietos intentan despojar a su abuela de su casa, en Marquelia

* Alegan que la casa la construyó su mamá y ellos son los propietarios

PATRICIA GARCÍA DÁMASO
MARQUELIA, GRO.

La disputa de una casa fue nuevamente el escenario de una pelea durante la mañana de este miércoles 17 de enero en el municipio de Marquelia, cuando María Elisa Báez Castillo, de 83 años, se encontraba en la puerta de su casa, esperando que le permitieran entrar.

Sus hijos: Jorge, Jesús y Mireya Salgado Báez, se encontraban con ella y solicitaron la presencia de este medio de comunicación, asegurando que los nietos ya no permitían el acceso de su madre al domicilio.

Jorge Salgado Báez, hijo de María Elisa Báez Castillo, explicó que dicha propiedad, ubicada en la calle Obregón, en el centro de Marquelia, le fue cedida por su madre en el 2007.

Sin embargo, al hacer esta cesión había una cláusula donde se especificaba que mientras ella siguiera viva, continuaría viviendo en el predio.

En la cláusula Quinta, del acta firmada el 20 de septiembre de 2007, se lee: “Manifiesta la donadora, C. Elisa Báez Castillo, que este documento entrará en vigencia después de que ella deje de existir, y además, que su hijo el C. Jorge Salgado Báez, deberá comprarle un terreno de 100 metros cuadrados a su hermana, la C. Mireya Salgado Báez, en un lugar accesible. En caso de no hacerlo así, entonces el terreno del que habla el presente documento se dividirá en partes iguales para que la mitad sea para su hijo, Jorge Salgado Báez, y la otra mitad para su hija Mireya Salgado Báez”, documento expedido en el periodo del ex comisariado ejidal, Luciano Santiago Alvarado.

Al respecto, los hijos de Elisa Báez Castillo aseguran que ahora los nietos: Joselyn Salgado Siriaco y Elder Said Salgado Siriaco, ya no permiten el acceso de la mujer adulta: “Esta casa es de nuestra mamá, hasta que muera, porque así está en la cláusula”.

Jorge, Jesús y Mereida solicitaron la intervención de la síndica procuradora de Marquelia, Selene Irra López, pues dijeron que estaban cometiendo un despojo en contra su madre, Elisa Báez Castillo.

La alegata inició cuando los hijos de Elisa Báez pidieron que dejaran entrar a su madre al domicilio, sin embargo, Elder Said Salgado Siriaco, nieto de la mujer adulta, dejó en claro que él era el dueño de la propiedad, asegurando que tenía documentos que lo probaban, además de que su madre la construyó.

Los hijos decían que María Elisa Báez debía ingresar al domicilio, pero justo ahí empezaron los reclamos y los reproches, pues Elder Said Salgado Siriaco (nieto), decía:

“Yo no me opongo a que mi abuela entre, pero quiero saber quién va a dar para la manutención de ella, porque ninguno de sus hijos se hace responsable de ella”.

Sin embargo, Jorge, Jesús y Mireya, insistían que la casa era de su mamá, por lo que le tenían que permitir el ingreso.

Al ser cuestionada, la afectada, María Elisa Báez Castillo, expresó: “No puedo creer lo que me están haciendo mis nietos, su mamá se fue a Estados Unidos y me los dejó cuando aún estaban en brazos. Con puras papillas los hice crecer, ni dormía pensando que se fuera a caer de la cama Elder. Mientras que Joseline, mi nieta, fue muy delicada para comer, ahí ando cuidado qué darle de comer y ahora ve lo que me hacen”.

Elder Said Salgado Siriaco en todo momento sostuvo que era el dueño y que no se oponía que su abuela ingresara al domicilio, pero pedía saber quién daría para la manutención y quién se iba a hacer cargo de su abuela, pues él trabaja de pelar pollos, sale temprano de la casa y por lo regular no está en el domicilio.

Los hijos de María Elisa Báez Castillo aseguraron que el comisariado ejidal, Adolfo García Montes, estaba actuado a favor de los nietos y estaba desamparando a su madre.

Algunos vecinos del lugar que fueron consultados, consideran que la razón la tiene María Elisa Báez Castillo, pues toda su vida ha vivido en ese lugar, mientras que otros decían que la razón la tienen los nietos, pues se han hecho cargo de su abuela.

Finalmente, para que María Elisa Báez Castillo pudiera ingresar al domicilio, los hijos contrataron a un cerrajero y fue que pudo ingresar.

“Le vamos a entregar a usted el documento donde está la cláusula donde dice que hasta que mi madre muera la casa será de su hijo, Jorge Salgado Báez, a quien le cedió los derechos, documento que el comisariado ejidal no quiere respetar”.