Con resguardo de la SSP, Sedena y GN regresan los desplazados a Palantla

*Estado y Federación, ofrecen garantías para evitar más ataques de la CRAC-PF

ROGELIO AGUSTÍN/SNI
CHILPANCINGO, GRO.

En camiones del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional (GN), habitantes de San Jerónimo Palantla, municipio de Chilapa de Álvarez regresaron a sus casas, de donde fueron expulsados a balazos el 22 de mayo por integrantes de la Policía Comunitaria de los Pueblos Fundadores (CRAC-PF).

La noche del 22 de mayo, los pobladores de San Jerónimo Palantla reportaron la incursión de integrantes de la CRAC-PF procedentes de las comunidades vecinas de Rincón de Chautla y Alcozacán, todas pertenecientes a Chilapa.

El despliegue de civiles armados provocó que por lo menos 300 pobladores salieran de sus casas, caminando entre cerros y en la oscuridad.

En el lugar se reportó la quema de tres casas, la comisaría y la destrucción de cuatro vehículos, además del saqueo de varias tiendas de abarrotes que quedaron abandonadas.

Los desplazados fueron en su mayoría mujeres y niños, que por espacio de seis días permanecieron en la Casa del Campesino, ubicada en la cabecera municipal de Chilapa.

Ahí dialogaron con funcionarios del Gobierno de Guerrero, entre ellos Francisco Rodríguez Cisneros, subsecretario de Asuntos Políticos de la Secretaría General de Gobierno.

Desde el 24 de mayo, elementos de la Policía del Estado, la Guardia Nacional (GN) y el Ejército asumieron el control de la comunidad, lo que propició el retiro de los integrantes de la CRAC-PF, coordinados por Jesús Plácido Galindo.

Pese a que los civiles armados ya no estaban en la localidad, los desplazados no consideraban que existieran las garantías para regresar a San Jerónimo Palantla, por el riesgo de que se registraran nuevos ataques, una vez que se tuvieran reinstalados en sus viviendas.

Para la mañana del martes 28 de mayo, se estableció un acuerdo, en el que se establece el compromiso de que las corporaciones del Estado y la Federación van a permanecer en la comunidad, para inhibir cualquier intento de ingresar por parte de la CRAC-PF.

En los datos que se conocieron, es que de la Casa del Campesino de Chilapa salió un camión de la Sedena con 44 personas, en tanto que en otro camión de la GN van 65 personas más, en su mayoría mujeres y niños.

Junto con esas dos unidades partió un camión de volteo cargado de despensas, que se van a distribuir entre las familias afectadas por la incursión de la comunitaria de Rincón de Chautla.

Las unidades pesadas van acompañadas por personal operativo de la SSP-Guerrero, la Sedena y la Guardia Nacional.