*La llegada de Gálvez a su tierra natal representa el último esfuerzo de la candidata por movilizar a las y los votantes antes de las elecciones, en un lugar significativo para su vida y carrera
*Pide salir a votar sin creer que los resultados ya están definidos
*Máynez, por su parte, cerrará su campaña con un evento musical “dedicado para las y los jóvenes”
SINEMBARGO
CIUDAD DE MÉXICO
Los candidatos presidenciales Xóchitl Gálvez Ruiz, de la coalición opositora “Fuerza y Corazón por México”, y Jorge Álvarez Máynez, del partido Movimiento Ciudadano (MC), concluirán sus actividades de campaña electoral este miércoles, a la par que su contrincante Claudia Sheinbaum Pardo aglutinó a miles de personas en el Zócalo de la Ciudad de México.
La aspirante de los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD), realizará su cierre de campaña definitivo en la comunidad de Tepatepec, en el estado de Hidalgo, localidad de donde es originaria.
En una conferencia de prensa, Marco Mendoza Bustamante, dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), anunció que el cierre está programado para realizarse durante la noche del miércoles 29 de mayo.
El dirigente informó de forma breve que el último acto proselitista será en Tepatepec, comunidad que pertenece al municipio de Francisco I. Madero. El día 30 comienza la veda electoral, por lo que ningún candidato puede promover su imagen.
Anteriormente, Xóchitl Gálvez planeó concluir su campaña en la Arena Monterrey, en el estado de Nuevo León.
Sin embargo, fuentes informaron a Central Hidalgo que la candidata estuvo “contenta” con el lleno que tuvo en su visita a Pachuca, en la Plaza de Toros. Por ello, decidió que celebraría su último encuentro en su tierra natal.
Este acto marca el último esfuerzo de la candidata por movilizar a las y los votantes antes de las elecciones, en un lugar significativo para su vida y carrera.
Xóchitl Gálvez realizará el cierre de su campaña en Tepatepec, Hidalgo, debido a que ahí nació el 22 de febrero de 1963. La candidata es hija de Heladio Gálvez, quien era profesor bilingüe, mientras que su madre, Bertha Ruíz, era ama de casa.
Ambos progenitores tenían raíces otomíes, toda vez que el padre hablaba hñähñu, una de las lenguas indígenas de El Valle del Mezquital. Por eso, Xóchitl Gálvez se ha abanderado como una candidata de origen indígena.
A pesar de que sus raíces indígenas y origen en una pequeña comunidad en el estado de Hidalgo ha sido parte de los discursos principales de Gálvez, a los habitantes de Tepatepec poco les importa la suerte de su paisana y están más concentrados en sus problemas cotidianos.
La exsenadora Gálvez está respaldada por una coalición de partidos que conforman el conservador PAN, el PRI —que gobernó México durante 71 años— y el históricamente izquierdista PRD. Y, aunque comenzó su campaña como un fenómeno político, su popularidad ha ido disminuyendo.
Eso se palpa incluso entre algunos de sus paisanos, que han llegado a cuestionar la historia de vida de Gálvez, que comenzó en una modesta casa de adobe de Tepatepec.
“No es verdad que ella fuera pobre”, dijo la comerciante María del Socorro Mendoza. “Su papá era maestro y su familia era una de las que mejor vivían aquí”, agregó Mendoza, de 54 años, mientras acomodaba, junto a su hija, algunas verduras en un estante del mercado de Tepatepec.
Mientras Xóchitl Gálvez, que acostumbra a vestir huipiles bordados, ha utilizado su origen pobre y rural y sus raíces indígenas como arma política para distinguirse de Sheinbaum —una científica de clase media que nació en la capital mexicana— pocos en su poblado natal se atreven a hablar a su favor. Rechazan que Gálvez identifique a Tepatepec como una comunidad pobre, aunque admiten que en los tiempos en que la candidata vivió allí era un pueblo con muchas necesidades.
“Ella hubiera transcendido aquí si hubiera hecho algo por su municipio, pero no ha hecho nada”, afirmó Juana Manzo, una vendedora de verduras del mercado público de Tepatepec, mostrando su desacuerdo con la candidatura de su paisana. “Aquí no pinta nada”, agregó.
Sin embargo, familiares de Gálvez dijeron a The Associated Press que el padre de la hoy candidata presidencial era un alcohólico al que se le iba el salario en bebida. Su hija Xóchitl, a los ocho años, tuvo que salir a la calle a vender tamales y gelatinas para ayudar a su familia, recordó una de sus vecinas, María de los Ángeles Acevedo, de 64 años.
Desde uno de los cuartos de una modesta casa de paredes de abobe donde vivió la exsenadora en su infancia, su primo también defendió las raíces indígenas de la familia Gálvez, algo que ha sido puesto en duda por sus adversarios. Como prueba de ello, mostró una antigua fotografía de sus abuelos, que guarda en su teléfono móvil. En la imagen, se observa a la pareja vestida con trajes tradicionales. Ramón Gálvez recordó que ambos solían hablar en la lengua otomí.