Apoya ex rector la reforma judicial, pero con candados en elección de jueces

MARCIAL CAMPUZANO
CHILPANCINGO, GRO.

El ex rector y ex director de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Guerrero, José Alfredo Romero Olea, calificó como necesaria la reforma judicial planteada por el presidente de la República, aunque consideró que ésta debe tener candados en lo que se refiere a la elección de jueces, magistrados y ministros a través del voto popular.

En entrevista el catedrático de la Facultad de Derecho señaló que desde hace años, la sociedad ha estado pidiendo “un Poder Judicial que pueda impartir justicia”.

La reforma judicial que propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador al Congreso de la Unión, tiene cuestiones importantes y contenidos que deben ser analizados en su justa dimensión, agregó.

Con candados bien definidos en el proceso de selección de los jueces, magistrados y ministros, la reforma judicial pudiera ser una buena propuesta, “lo que habría que evitar es que otras instancias decidieran por la sociedad”, dijo el ex rector de la máxima casa de estudios.

Manifestó su confianza de que los diputados federales y los senadores, analicen bien la iniciativa ya aprobada hasta ahora por el Congreso federal, porque seguramente cuentan con gente bien preparada estudiosa del Derecho, para que los poderes fácticos no se involucren en la elección de jueces, magistrados y ministros.

Manifestó su confianza de que la reforma judicial planteada por el presidente de la República, “sea una buena propuesta para mejorar al Poder Judicial federal”.

Señaló que Guerrero y el país requieren de un aparato de justicia más ágil con respeto a los derechos humanos. Será importante que ya no haya más dilación en los asuntos que se ventilan en los juzgados, se requiere de mayor celeridad para que la justicia sea pronta y expedita.

Aclaró que el alargamiento de los juicios lo permiten los Códigos y las leyes secundarias que de éstos emanaron porque se presentan recursos. Aclaró que la reforma judicial deberá ser un todo, y no sólo limitarse a la elección o designación de quienes impartan justicia.