“Alejandro Arcos ya es una semilla de paz”, agradece familia del alcalde asesinado
*Cientos saturan la catedral de la Asunción de María
*Va poca clase política, pero se congregan habitantes de barrios y colonias
ROGELIO AGUSTÍN/SNI
CHILPANCINGO, GRO.
Cientos de habitantes de colonias populares y barrios tradicionales saturaron la catedral de la Asunción de María, en el corazón de Chilpancingo, para acompañar a la familia del presidente municipal Alejandro Arcos Catalán, a nueve días de su asesinato.
Si bien hubo algunos integrantes de la clase política local, lo que volvió a quedar de manifiesto es el arraigo que el finado primer edil tenía entre sus electores, pues nuevamente la catedral del centro de la ciudad fue saturada por la una gran cantidad de personas que llegaron por su cuenta, sin que se les ofrecieran unidades del transporte público para facilitar sus traslados.
La misa estuvo a cargo del obispo José de Jesús González Hernández, quien durante su mensaje recordó al presidente Arcos Catalán como un permanente promotor de la paz, en un municipio que se encuentra en medio de la zona de interés de dos grupos del crimen organizado.
En la iglesia, cerca de la familia estuvo el presidente del Consejo Estatal del PRD, Marco Antonio Organiz Ramírez, afuera se quedó varado el dirigente estatal del PRI Alejandro Bravo Abarca.
Discreto, se miró también al ex diputado local Jorge Salgado Parra, quien fuera oponente de Arcos Catalán en los comicios del pasado 2 de junio, pero quien se sabe, durante muchos años fue compañero de equipo político del alcalde asesinado, cuando militaron en las filas del PRI y luego en el PRD, bajo el liderazgo del ex gobernador Ángel Aguirre Rivero.
Los nombres, las siglas y los colores de los partidos políticos nuevamente quedaron rebasados, lo que se observó en la catedral de la Asunción fue una gran cantidad de personas que acudieron con el interés de abrazar a la familia, por esa razón es que aguantaron con respeto y paciencia el desarrollo de la misa de nueve días.
En la parte final, la señora Sandy Solis Peralta, viuda de Arcos Catalán, a nombre de la familia agradeció el acompañamiento que la población de Chilpancingo les ha dado desde la jornada del 6 de octubre, cuando se confirmó el violento deceso del presidente.
“Alejandro es ya una semilla de paz”, dijo la esposa de Arcos, luego vino un prolongado aplauso en reconocimiento al trabajo hecho en vida.
Las amplias instalaciones de la catedral de Chilpancingo tardaron en liberarse, pues el interés de abrazar a la familia doliente prolongó la retirada.