*La FGE precisa que se trata de un testigo único, cuyos dichos se pueden corroborar con otros elementos obtenidos en la investigación del caso Alejandro Arcos Catalán
La defensa refiere que el señor Domitilo Cándido Pila no pudo retener “de memoria” datos esenciales para la investigación
*Como absurdas, califica Germán Reyes Reyes las declaraciones del testigo y al hecho de que les otorguen valor probatorio
ROGELIO AGUSTÍN/SNI
JESÚS DORANTES
CHILPANCINGO, GRO.
Durante dos horas y media, la defensa del capitán en retiro, Germán Reyes Reyes presentó argumentos encaminados a desvirtuar el testimonio de Domitilo Cándido Pila, un adulto mayor de 69 años de edad, localizado muerto el pasado 6 de noviembre, quien al comparecer ante la Fiscalía General del Estado (FGE), el pasado 27 de octubre acusó al ex jefe de la policía preventiva municipal de ordenar el asesinato del alcalde Alejandro Arcos Catalán.
La audiencia de vinculación comenzó poco después de las 10:00 horas de este lunes 18 de noviembre y culminó pasadas las 13:30, luego de la presentación de alegatos por parte de la defensa y de la argumentación por parte de la FGE, que sostiene que hay elementos para vincular a proceso a quien encargado de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal.
Reyes Reyes durante casi toda la audiencia se mostró sereno, apareció en la sala vestido con una playera color azul cuelo y pantalón de mezclilla, el cabello corto y su complexión delgada evidenciaban su formación militar.
Cuando tuvo la oportunidad de hacer uso de la palabra, dijo que respaldaba todo lo expresado por su defensa, integrado por tres abogados, dos varones y una mujer, además, pidió a la juez de control ser imparcial y objetiva al momento de emitir la resolución correspondiente.
Testigo
singular
Desde el inicio, la defensa de Reyes Reyes se refirió al fallecido Domitilo Cándido Pila como un testigo singular, quien aportó un testimonio sustentado en los comentarios de terceros y nunca manifestó haber observado o escuchado de manera directa lo declarado por las personas que señala, tres integrantes de una célula delictiva que le exigían el pago de una cuota de 500 pesos a cambio de permitirle vender figuras religiosas en la iglesia de la comunidad de Petaquillas.
Los hombres a los que hace mención el testigo, que fue encontrado muerto en su domicilio el pasado 6 de noviembre, son señalados con los alias del El Michoacano, El Junior y El Jimmy, quienes al trasladarlo hacia un rancho ubicado en el municipio de Quechultenango, aproximadamente a una hora de distancia, hablaron delante de él algunos detalles sobre el asesinato cometido en contra del alcalde Arcos Catalán.
De hecho, el testigo al que la defensa refiere como “singular” dijo que identificó al “Michoacano” por su nombre, ya que éste cruzó una llamada con quien dijo ser el capitán Germán Reyes y durante la comunicación le solicitó que lo metiera a la nómina del Ayuntamiento, por lo que el entonces funcionario le pidió que proporcionara el nombre, siendo este Marco Antonio Osorio Castrejón.
La defensa reprochó que la FGE no haya considerado que un hombre de 69 años de edad, no está en condiciones de retener a memoria datos como nombres, apodos, características personales, direcciones, fechas ni horarios, por lo que no se le podía considerar como un testimonio válido, puesto que lo declarado en torno al caso de Alejandro Arcos lo había obtenido de meras “oídas” y nunca observado de manera directa.
La FGE reviró manifestando que lejos de ser un testigo singular o de oídas, el señor Cándido era un testigo único, cuya aportación se pudo corroborar con otros elementos obtenidos en el proceso de investigación.
Destacó la representante del Ministerio Público, que lo dicho por un testigo único sí puede considerarse con valor probatorio al contener información que se puede corroborar.
Precisó que no se trata de un testigo de oídos, más bien se está ante un testigo de referencia cuyo aporte permite establecer el hilo ante un hecho concreto.
Más aún, la FGE destacó que Domitilo Cándido dijo en su declaración del 27 de octubre, que entre los comentarios escuchados en el rancho al que fue llevado en Quechultenango, pudo percatarse de una llamada entre “El Michoacano” y una persona identificada como “El Patrón”, quien le habría señalado que tenía comunicación directa con Germán Reyes, entonces jefe de la policía en Chilpancingo.
La defensa cuestionó el hecho de que al señor Domítilo se le haya regresado a la comunidad de Petaquillas después de haber escuchado información tan grave con solo una advertencia: “No vayas a andar de bocón”.
La causa, fue que los tres presuntos delincuentes al llegar recibieron un reclamo por parte de enviados “del patrón”, que les dijeron que no querían “gente” en ese rancho porque ahí habían matado al presidente municipal de Chilpancingo.
Sea imparcial
y objetiva
En la parte final de la audiencia, el imputado Germán Reyes Reyes pidió ala juez de control que no lo vincule a proceso, pues refirió, de todo lo expuesto por la FGE, no hay un solo elemento que lo vincule con el asesinato del alcalde Arcos Catalán.
Dijo que no era posible que lo vinculen a proceso con el señalamiento de tres personas identificadas por sus apodos:
¿Cuántos apodados como junior habrá? ¿Cuántos Jimmys? Lo que se dice es subjetivo e irrelevante.
¿Qué valor le damos a noticias que cualquiera puede generar en redes sociales?
Solicitó a la juez actuar de manera imparcial y objetiva, tomando en cuenta que no existe ninguna imputación directa en lo que se ha expuesto en su contra.
Dijo que al dejarlo en libertad no se genera impunidad, pues por el contrario, se da la oportunidad a que la FGE realice una investigación de manera objetiva y clara.
Esta misma tarde, la juez emitirá una resolución en torno al caso.