Galardonan a Javier Martínez con dos doctorados Honoris Causa

* Las condecoraciones fueron entregadas por su contribución a la educación y la neurociencia

LUIS HERNÁNDEZ
OMETEPEC, GRO.

Javier Martínez Juárez, docente de la Preparatoria No. 5 de Ometepec, fue galardonado con dos doctorados Honoris Causa, por las contribuciones que ha realizado en la neurociencia.

Martínez Juárez es Doctor en Ciencias de la Educación, docente de la Universidad Autónoma de Guerrero y de la escuela Secundaria Plan de Iguala de Acatepec, así mismo, en días pasados fue condecorado con dos doctorados.

Abordado sobre estos reconocimientos, en la cabecera municipal de Ometepec, explicó:

_Mira, hace tiempo me habían contactado para ver si podía aceptar un Doctorado Honoris Causa, ya que conocían algunos trabajos de investigación que había realizado sobre Neurociencia Aplicada a la Educación y Neuroemocionalidad.

Esto hizo que yo enviara mi currículum a la Kinneret Academy of Arts and Sciences Teacher Leadership Institute, que fue la organización que me lo pidió. El claustro valoró mi currículum, en el que había algunos detalles, como por ejemplo, haber recibido el Premio Nacional al mejor estudiante de México en 1990, haber recibido por parte del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación el reconocimiento como el maestro más destacado del Estado de Guerrero, detalles como la condecoración que me dio la USICAM por las estrategias que implementamos en la escuela secundaria Plan de Iguala en el momento de la pandemia y que no permitimos que nuestros estudiantes se nos fueran, y además pudiéramos lograr los aprendizajes esperados. También gané otro concurso acerca de la redacción de todas las estrategias a través del sindicato.

Situaciones como estas y toda la trayectoria que, de alguna manera, muy humildemente, hemos realizado en aporte a la educación, hicieron que me dieran el primer Doctorado Honoris Causa por parte de esta organización, que está compuesta por los países de Israel, España y Argentina.

_¿Cuándo recibió este premio?

_Me lo entregaron el 27 de junio de 2024, y fue en la Ciudad de México. Ahí me entregaron el primer Doctorado Honoris Causa. Se tardó como un mes aproximadamente la valoración por parte del claustro, que es un conjunto de doctores que revisan el perfil y la trayectoria, ya sea en el aspecto académico, científico, cultural o social. Y quienes aportan algo a la humanidad son a quienes le dan un Honoris Causa.

_¿Cuándo recibió el segundo Doctorado Honoris Causa?

_La segunda condecoración Honoris Causa me la entregaron el 25 de julio en la Ciudad de México, y fue por parte de cuatro países, incluyendo México, Colombia, Cuba y República Dominicana. Fue el Consejo Diplomático Honorífico de Formación Internacional Social Project A.C. quienes me entregaron el Ciudadano Honoris Causa, que me otorga este segundo doctorado por las aportaciones también a la educación y al trabajo pedagógico. Aquí habla de una actitud altruista; yo, por ejemplo, trabajo la hipnosis regresiva e introspectiva y psicoterapia sin cobrarle absolutamente un peso a nadie, solamente para que la gente pueda resolver sus problemas emocionales.

Además, trabajo también la grafología científica, y por ese desempeño también altruista del desarrollo del mundo, mejorando y ayudando al prójimo, y por otros méritos profesionales que reconoció este consejo, fue que me dieron este doctorado.

Y ahora, acabo de recibir otra notificación en mi correo de que van a condecorarme a principios del mes de diciembre con otro Doctorado Honoris Causa; con este serían tres doctorados.

Aparte, tengo tres doctorados académicos: uno por el Instituto de Estudios Superiores de Puebla, uno por el Instituto Mexiquense y otro por el Centro Universitario del Pacífico Sur.

Aparte de eso, también tengo dos maestrías: una en educación superior y una en ciencias de la educación. También tengo dos licenciaturas: una en ciencias sociales y la otra en educación primaria.

_¿Cómo se siente luego de recibir estos premios?

_La verdad, para mí fue una sorpresa. Al principio no lo creía. Alguien me decía que en Costa Chica no había todavía una persona que recibiera un Honoris Causa; no lo sé, no tengo ese dato. Mucha gente me felicitó; no me caía el veinte, la verdad, hasta que fui a recoger ese doctorado y estuve analizando la trascendencia que tenía.

Yo, la verdad, me siento sinceramente preocupado porque ahora tengo que escribir en revistas indexadas, tengo que aportar más a la educación, tengo que demostrar que realmente estos doctorados Honoris Causa no deben estar solamente en la pared, sino que se tienen que demostrar ante la sociedad y aportar más y más a la educación y al servicio docente.

_¿Qué es la condecoración Honoris Causa?

_Un Doctorado Honoris Causa se le entrega a la o las personas, e incluso instituciones, también o personas póstumas, que hayan aportado algo a la humanidad, que se hayan dedicado a la ciencia, al arte, la cultura o al servicio social, y que hayan apoyado o que haya servido su trayectoria, tanto profesional como trayectoria en el sentido fáctico de los hechos, y que hayan mejorado de alguna manera alguna parte de la vida en este mundo.

En este caso, mi aportación es fundamentalmente a la educación, a la ciencia y a la cultura, y por lo menos eso es lo que valoraron estas instituciones y estos países. Ahora voy a esperar para ver en esta ocasión qué países son los que van a condecorarme en ese sentido.

Yo, la verdad, siento que estos doctorados son inmerecidos; en serio, porque hay gente que tiene mucho más trabajo social, que ha expuesto hasta la vida por la humanidad, por la gente, por los niños, y yo lo único que he hecho es simplemente lo que me gusta: trabajar en la educación, ser docente y tratar de aportar y generar innovaciones en la educación. Eso es lo único, y pues si eso me ha permitido recibir estos doctorados, pues sí, precisamente no me siento ni más ni menos; simplemente sigo siendo el mismo Javier de siempre.

Hay gente que dice «doctor», y yo, la verdad, digo: «No soy doctor, soy tu amigo, para empezar». Y simplemente eso, yo creo que la humildad y la sencillez no la debe uno perder por los documentos o por los títulos; eso solamente se cuelga.

Aquí, el doctor a veces no quita la maldad; Yo creo que lo que tenemos que hacer no es decir algo a favor de nosotros y ni siquiera que los demás digan de nosotros, sino demostrar lo que realmente somos, porque lo que realmente somos son nuestros hechos.

_¿Cuál es su mensaje para la población y los profesionistas de Ometepec?

_Yo creo que hay que trabajar con amor, con pasión, hay que hacer las cosas que nos toca hacer en la vida para construir un mundo donde quepan muchos mundos, donde podamos pensar diferentes, pero podamos converger en una idea de progreso, en una idea de mejorar siempre la calidad de vida de los demás, y sobre todo, yo considero que donde debemos mejorar fundamentalmente es la educación. Si vamos a batir lo que es la delincuencia, los vicios, las drogas, eso se hace con la educación. Yo creo que la educación es el arma más poderosa con la que podemos cambiar el mundo.