Alcalde, sindica y director encubren a policías abusivos, se queja agraviado

*Reclama la devolución de 2,500 pesos que dice le sacaron de su cartera durante una ilegal detención

*Al no obtener respuesta, continuará con la demanda que interpuso ante el MP

*El regidor de Seguridad Pública tampoco quiso intervenir

YONATHAN BAUTISTA
SAN LUIS ACATLÁN, GRO.

Luego de que fue detenido de forma arbitraria por policías municipales de San Luis Acatlán, al mando del comandante Gabriel Méndez Ponce, el vecino de la colonia Bethel, Amadeo González Basurto, denunció negligencia y encubrimiento por parte de las autoridades municipales en el caso que denuncó.

Amadeo González dijo que interpuso su denuncia ante el Ministerio Público por el delito de abuso de autoridad y lesiones, por parte del comandante mencionado y su grupo de policías, “esto cuando fui detenido sin razón el pasado 21 de marzo”.

Al día siguiente, elementos de la Policía Ministerial realizaron la inspección en el lugar de los hechos. “Ese mismo día, ya por la tarde, me llamó a mi teléfono privado el alcalde petista, Adair Hernández Martínez, citándome en su domicilio ubicado en el barrio de San Isidro; esto para supuestamente tomar cartas en el asunto y resolver el asunto. Una vez que llegué al domicilio, el arreglo consistió en darme 500 pesos, y que para él, el asunto había quedado resuelto.

“Yo le pedí que en su calidad de primera autoridad del municipio tomara cartas en el asunto,en contra de su comandante de la Policía Municipal y sus elementos, ya que a grandes rasgos, le explique cómo fueron los hechos.

“Finalmente me dijo que este asunto se lo turnaría a su síndica, Gilberta Dolores Gálvez, y que yo fuera al día siguiente al Ayuntamiento, a las 10:00 de la mañana y me dirigiera con ella.

“Como habíamos acordado, me presenté en el Ayuntamiento y estuve poco más de 3 horas esperando la audiencia con la síndica. Finalmente salió su secretaria particular y me dijo que no acudiría a laborar, por lo que me volvieron a citar al día siguiente, y ya estando nuevamente en el Ayuntamiento, la síndica no quería que mi abogado me acompañara en la audiencia, sino que entrara yo solo; yo respondí que si él no entraba, yo tampoco. No teniendo de otra, entramos, y ya se encontraba allí el director de la Policía Municipal, Armando “N”, quien de entrada nos calificó, a mí y a mi abogado, como revoltosos, esto en presencia de la síndica.

“Les dijimos que si ese trato de humillación e irrespeto iba a imperar en el encuentro nos íbamos a retirar. Viendo que en presencia de la síndica nos insultó y ella no dijo nada, optamos por retirarnos. Está más que claro que la síndica y el director de Seguridad están encubriendo a los elementos en su mal actuar”.

_Usted comentaba que le solicitó el apoyo al regidor de Seguridad Pública, Jose Luis Apreza Hernández, ¿qué fue lo que le comentó?

_De entrada, el día en que me liberaron, mi abogado buscó al regidor con la finalidad de que nos ayudara. El regidor se encontraba en el ayuntamiento y nos citó en calle Hidalgo esquina con 2 de Abril, del barrio de San Isidro, en las afueras del domicilio de sus padres, ya que no nos quiso atender en su cubículo porque no quería que lo viera el alcalde, pero para su suerte, a los cinco minutos pasó el alcalde y lo vio, ocasionando que se pusiera nervioso.

Aunado a eso se le explicó la situación, y es la fecha en que el regidor de Seguridad, José Luis Apreza Hernández, ni a mi abogado ni a mi nos ha dado una respuesta. Me queda claro que el regidor priista dejó de ser oposición y ahora es del equipo de mi compadre el alcalde.

Quiero pedir al Cabildo, en conjunto, tomar cartas en el asunto; de igual forma, al alcalde, lo que me queda es la esperanza de que el Ministerio Público haga justicia, que es lo que vengo pidiendo y buscando, ya que por parte de la autoridad municipal no encontré apoyo.

Existió un robo de 2 mil quinientos pesos a la hora de la detención, 500 pesos me cobraron para dejarme libre sin darme un recibo, los cuales, mi compadre Adair me entregó cuando me citó en su casa, pero no se trata de devolver lo robado, solamente se trata de resolver este agravio a la persona, una afectación a los derechos humanos.

Dijo que, al no obtener respuesta, continuará con la demanda que interpuso ante el Ministerio Público.