Bloquearon transportistas la Autopista del Sol para exigir seguridad
JESÚS GUERRERO
AMAPOLA PERIODISMO
Transportistas de municipios de la región centro y Costa Chica que exigen medidas de seguridad desbloquearon a las 15 horas con 30 minutos la autopista del Sol Cuernavaca-Acapulco después de que sus dirigentes tuvieron una reunión con autoridades de la Fiscalía General del Estado.
Los trabajadores del volante cerraron la vía de cuota en el kilómetro 272 a las ocho de la mañana pero dos horas después dejaron el paso libre en dos de los cuatro carriles al aceptar un diálogo con el vicefiscal Ramón Ayala Gamboa y uno de los asesores de la gobernadora Eveleyn Salgado Pineda.
La protesta en la carretera por parte de unas 500 unidades de transporte público provocó que miles de personas de los municipios de Mochitlán, Quechultenango, Chilpancingo, Tierra Colorada, Tecoanapa y Cruz Grande se quedaran sin el servicio.
Miles de estudiantes y trabajadores que utilizan el transporte público no pudieron trasladarse a esta capital del estado.
Los dirigentes de estas organizaciones firmaron una minuta con el Vicefiscal en donde se hace el planteamiento de que se permita la reinstalación de un retén de una supuesta policía comunitaria de la UPOEG en la carretera Chilpancingo- Petaquillas a la altura del cuartel de la Guardia Nacional.
Este retén de la supuesta policía comunitaria fue retirado desde el 2020 por una serie de denuncias de desapariciones forzadas que cometían estas autodefensas contra la ciudadanía.
Otro de los planteamientos que se le hizo al vicefiscal Ramón Ayala Gamboa es de que se refuerce la búsqueda del taxista Francisco Imer Casarrubias García quien desde el pasado 7 de mayo está desaparecido.
La última vez que se le vio a Casarrubias García fue cuando daba un servicio a un pasajero en el trayecto de la carretera federal Buenavista de la Salud-Cajeles, del municipio de Chilpancingo.
En la reunión estuvieron los familiares del trabajador del volante desaparecido y que es originario de Buenavista de la Salud.
La protesta de los trabajadores del volante se realizó un día después que el dirigente de la Unión de Transportistas del Estado de Guerrero (UTREG), Francisco García Marroquín, fue asesinado a balazos por dos pistoleros cuando manejaba en un automóvil en la avenida Lázaro Cárdenas, al sur de esta capital.
«Gobernadora, si nos siguen secuestrando y asesinando vamos a seguir bloqueando la autopista», decía una de las consignas pintada en los parabrisas de los taxis, camionetas urvans y camiones de las diversas rutas foráneas.
Al bloqueo llegaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública con equipo antimotin, mismos que realizaron una valla entre los taxistas, aunque sólo permanecieron haciendo presencia, ya que decenas de combis y taxis estuvieron bloqueando la la carretera.
Además, llegó Arturo Salinas Sandoval, director general de Transportes en el estado y el director de Gobernación estatal, Francisco Rodríguez Cisneros, quienes dialogaron con los transportistas y acordaron una mesa de trabajo con las viudas de taxistas, líderes del transporte, y la fiscal Sandra Luz Valdovinos Salmerón.
En la protesta participaron trabajadores de las rutas: Dos Caminos, Tierra Colorada, Mohoneras, Tixtla, Colotlipa, Coyuca de Benítez, Petaquillas, Ocotito y Buenavista de la Salud.
Se estima que por lo menos 500 trabajadores del volante se involucraron en la protesta.
Los dirigentes de transportistas aseguraron que tienen cuatro compañeros desaparecidos.
