Sólo un mes de capacidad le queda al relleno de Acapulco

SERGIO ROBLES GALLEGOS
QUADRATÍN GUERRERO

Sólo un mes y medio de vida le queda a la celda número tres del relleno sanitario, debido a la gran cantidad de basura que se ha generado tras el impacto del huracán Otis en el puerto.

En un recorrido por Quadratín Guerrero, se constató que en el lugar, la tercera celda está a punto de llenarse, ahí son cinco máquinas las que trabajan, arrastran la basura y van llenando el área, además de abrir paso para que entre la gran cantidad de camiones.

Autoridades encargadas del relleno sanitario, aseguraron que en la normalidad, se trabaja con dos máquinas, pero ahora debido a la gran cantidad de desechos, enviaron otras tres más a que ayudarán.

Graciela Gómez, encargada del relleno sanitario afirmó que de lunes a viernes se reciben de mil 50 a mil 200 camiones con desechos que recolectados de las diferentes colonias, mientras que los domingos, la cantidad baja.

Para entender la situación, antes del impacto del huracán Otis, antes se recibían de 130 a 140 camiones al día, ahora arriban poco menos de mil.

En cifras, antes del huracán Otis, se recibía de 750 a 800 toneladas de basura diaria, ahora son nueve mil toneladas de desechos.

“Está la celda número tres, la teníamos preparada para que se terminara el año que viene, la celda nos aguanta a lo mucho un mes y medio”, afirmó.

Las autoridades señalaron que a partir del miércoles comenzará los trabajos de construcción de una nueva, la cuarta celda en el relleno sanitario.

Por otro lado, pepenadores en la zona hacen trabajos de limpieza, entre láminas, fierro viejo y aluminio; unas 120 personas acuden en grupos todos los días a recoger los desechos orgánicos.

Carlos Hernández, un pepenador de 68 años de edad, quien tiene 12 años recogiendo desechos, asegura que al día son 200 kilos los que puede recolectar, por el cansancio que es trabajar bajo los fuertes rayos del sol, así como del dolor de sus rodillas.

“Lo que ganamos aquí nos sirve para comprar las tortillas y la comida para nuestra casa, es el único trabajo que tengo porque ya en ninguna empresa ni negocio me contratan, incluso ni como peon o albañil”, concluyó.